1. Espectro sexual


    Fecha: 15/05/2023, Categorías: Hetero Autor: Anónimo, Fuente: RelatosEróticos

    ... no se creía lo que veía.
    
    Diego roncaba feliz sobre el sillón. Tenía los pantalones bajados y su polla estaba flácida. Al verlo en ese estado, Almudena no pudo evitar poner cara de disgusto. Guillermo llegó detrás, dando zancadas y lleno de preocupación.
    
    —Menos mal, se encuentra bien —comentó aliviado.
    
    —Sí, se le nota de putísima madre —habló jocosa la chica.
    
    Se aproximaron hasta llegar a su lado. El parapsicólogo se acercó para ver su estado, pero, por como roncaba, no parecía notarse ningún daño.
    
    —Creí que estaría peor —dijo Almudena.
    
    —No tiene por qué —expresó con su habitual elocuencia Guillermo—. No todos los espíritus son violentos y quieren hacer daño a la gente. El fantasma de la criada tan solo se limitó a absorber la energía de tu amigo, pero sin intención de matarlo. Tan solo se encuentra muy cansado, eso es todo.
    
    —¿Y va a despertar? —preguntó la chica mientras miraba a su amigo roncando.
    
    —Solo hay una forma de averiguarlo.
    
    Acto seguido, el hombre le soltó una buena bofetada en la cara a Diego. Este, nada más recibir el golpe, se revolvió asustado, dando incluso un pequeño bote, e inclinándose hacia delante.
    
    —¡Hostia puta! —gritó muy nervioso—. ¿¡Pero qué coño pasa?!
    
    Almudena se asustó un poco, aunque no tardó en calmarse al ver que Diego se encontraba bien. El chaval miró a los dos extrañado, al tiempo que se acariciaba la mejilla dolida.
    
    —¿Que hacéis vosotros dos aquí? —preguntó confuso— ¿Y la rubiaca que me estuve ...
    ... follando?
    
    Su amiga se limitó a encogerse de hombros mientras que el parapsicólogo decidió esclarecer el entuerto.
    
    —La rubiaca hace mucho que se marchó. —El comentario sonaba decepcionante—. Era solo un fantasma y nosotros estamos aquí porque te andábamos buscando. Ya es de día, por cierto.
    
    La explicación no pareció dejar muy conforme al muchacho, quien se arrebujó en su asiento mientras aspiraba un poco de aire, mostrando su disconformidad con lo ocurrido.
    
    —¿Y vosotros dos donde puñetas habéis estado toda la noche?
    
    La pregunta iba dirigida a ambos, pero los ojos del chico se posaron sobre su amiga, quien se retrajo un poco al notar la forma en la que la miraba. Sintiendo su apremiante ansiedad, no dudó en responder:
    
    —Pues…nos encerramos en una habitación… —Le costaba horrores hablar—. Había otro espíritu y…nos quedamos allí toda la noche. Fue muy horrible, tío.
    
    Creyó que había sido una buena explicación, pero cuando vio como Diego arqueaba una ceja, supo que algo sospechaba. Con todo, prefirió ignorarlo.
    
    —¿Es una cámara GoPro eso que llevas? —intervino de forma oportuna Guillermo.
    
    Para Almudena, eso hombre se estaba convirtiendo en algo así como su héroe.
    
    —Ah, sí esto, lo usé para grabar la exploración de la casa —comentó con sorpresa Diego al ver a lo que se refería.
    
    —Todavía sigue grabando —le señaló el parapsicólogo.
    
    El chico se quitó la cámara y observó que así era. En ese instante, su rostro cambió.
    
    —Ostras, eso significa que ha grabado lo que ...