1. Espectro sexual


    Fecha: 15/05/2023, Categorías: Hetero Autor: Anónimo, Fuente: RelatosEróticos

    ... ella no se enterase. El problema es que, al final, si se enteró.
    
    Almudena se sentó a su lado para ponerse los tenis y siguió atenta la historia.
    
    —Entonces, ¿los pilló? —preguntó muy intrigada.
    
    Guillermo asintió por respuesta.
    
    —Así es —aseguró con cierto dejo de fatalidad—. Una tarde en la que la esposa supuestamente se iba con los hijos a la ciudad a ver una obra de teatro, su marido y su criada aprovecharon para tener sexo. Lo que no sabían era que Maribel se había quedado y, cuando los pilló, los mató con una de las escopetas de caza que pertenecían al hombre.
    
    Un mal regusto se formó en el interior de Almudena. Solo de recordar la cabeza destrozada del señor Araujo o la espalda de la criada, donde se podían ver perfectamente los ocho agujeros de bala dejados, sintió su ser revolverse lleno de malestar.
    
    —Pe…pero, ¿cómo es posible que pasara eso? —dijo perpleja mientras asimilaba esos macabros datos—. Se suponía que el crimen se quedó sin resolver.
    
    El parapsicólogo sonrió con cierta malicia. Llevaba sus gafas puestas, lo cual le daba un toque interesante y sofisticado que no podría ser más atrayente para Almudena.
    
    —Bueno, resulta que en la biblioteca del barrio hallé una curiosa nota guardaba en uno de los viejos libros de las estanterías de arriba. Pertenecía al inspector que llevó el caso y, bueno, era hermano de la esposa del señor Araujo. Él se ocupó de encubrirlo todo.
    
    Los ojos de la chica se abrieron de par en par al oírlo.
    
    —Madre mía, ...
    ... ¿cómo lo supiste? –Ahora, estaba fascinada con todo el asunto.
    
    —Bueno, algo raro ya olía el tema cuando ves que el inspector que lleva el caso y la mujer de una de las víctimas son familia, así que solo tuve que indagar aquí y allí para reunir las pistas.
    
    Sonó un poco fanfarrón al decir todo eso, cosa que no le gustó a Almudena, pero tampoco podía negar que la labor de investigación hecha debió de ser exhaustiva y dura, así que entendía el pequeño tono de orgullo del hombre.
    
    —En fin, parece que la cosa no ha acabado mal y todo gracias a tu plan —le dijo mientras se ponía en pie.
    
    —Pues sí, habría sido terrible que ese fantasma te hubiera hecho daño —comentó Guillermo mientras acariciaba su pelo con suavidad.
    
    Ese leve gesto fue suficiente para que se mirasen y que la vergüenza hiciera acto de presencia. Apartaron sus miradas, muy alterados, sin poder creer lo que habían hecho la noche anterior. Era verdad que no tuvieron otra alternativa, dadas las circunstancias, pero eso no quitaba que habían tenido sexo y ahora, no era fácil encarar la situación.
    
    Almudena permanecía con la vista apartada hacia otro sitio cuando entonces, reparó en algo.
    
    —¡Diego! —exclamó sorprendida y salió corriendo de la habitación.
    
    —Almudena, espera —la llamó Guillermo, pero ella no le hizo caso.
    
    La chica corrió de una punta del pasillo a la otra. Estaba oscuro, pero al ser de día, se intuía un poco mejor todo, evitando así tropezar con lo que hubiera. Para cuando llegó al comedor, ...
«12...212223...»