1. ¿Te he contado mi primera vez?


    Fecha: 08/01/2022, Categorías: Sexo con Maduras Autor: Anónimo, Fuente: RelatosEróticos

    ... me abraza, y baja la mano, y me coge el miembro todo empalmado, y sonríe, y me abraza y se coloca el rabo en la entrada de su vagina, y mi capullo lo nota caliente, suave, lubricado, acogedor…
    
    -Te vas a follar a Mamá, mi bebé, y la vas a dejar llena de esa leche tan rica, cielito…- Y con una mano sujeta la polla en la entrada de su coño, y con la otra, aprieta sus nalgas para llevarle dentro de ella.
    
    Y para mí es indescriptible. La polla entra suave, abriendo el estrecho túnel que se va a adaptando al rabo que lo taladra. Y Mara sigue empujando mis nalgas contra ella, cruza las piernas por encima de mí, y jadea bajito, mientras nota, dada la experiencia que tiene en eyaculaciones precoces, como no voy a aguantar, y sube sus caderas y aumenta el ritmo…
    
    -Córrete, pequeñín, dale la leche a Mamá, como cuando se la has dado en la boca. Me encanta la leche de mi niño, córrete en el coño de Mamá- me susurra al oído, entre jadeos silenciosos de ambos, y me empuja contra ella para llevarlo al climax aunque ella aún no está lista.
    
    Y yo noto un relámpago dentro de mí, y por mi capullo sale una cantidad de leche tal que jamás he vuelto a echar tanto en toda mi vida. Y la lleno con mi lefa caliente, y sigo moviéndome frenético para prolongar mi orgasmo, que me impide respirar y que me ha tirado ...
    ... de una patada del mundo de la consciencia, y todo mi cuerpo se contrae como si tiraran de un cordón a lo largo de mi espalda, y me relajo de golpe, sin aliento, encima de Mara, con mi rabo duro aún dentro de ella, empapado de su flujo y de mi semen, que noto que escurre un poco hacia fuera.
    
    Y ella me abraza y sonríe. Y acaricia mi cabeza y me besa la mejilla.
    
    -Tenemos que hacerlo aún mejor, mi bebé- Porque ella no va a volver a tener coitos sin orgasmo, que por eso ya no hace nada con su marido, y que entiende la urgencia de la novedad, pero la novedad solamente es una vez.
    
    Yo asiento, obediente. Lo que ella diga, cuando ella diga, y como ella quiera. Faltaría más.
    
    Hubo más primeras veces, porque hay mucho que disfrutar en el sexo. Pero esa fue mi primera vez.
    
    Tuve la suerte que tuve, tuve la suerte de conocer otras mujeres mayores que yo, que siempre me gustaron incluso cuando las he igualado en edad, también más jóvenes, sobre todo inexpertas, pero no tuve la suerte (creo que la única vez que me ha faltado) de acostarme con Laura.
    
    Y no fue por la promesa, eso seguro. Nací viejo verde y moriré viejo verde. Realmente fue Laura la que cumplió mi promesa, pues nunca quiso acostarse conmigo. Los caminos del Señor son inescrutables…
    
    Ahora ya me puedes contar tú tu primera vez…” 
«12...9101112»