1. Lo raro de este mundo (capítulo dos): Luis


    Fecha: 22/04/2024, Categorías: Gays Autor: osazo21, Fuente: CuentoRelatos

    ... y después de ducharnos, me dijo que tenía compromiso, pero que no podía singarse a su amigo porque él tenía problemas con las hemorroides. Dormimos abrazados, y al amanecer antes de que se fuera al trabajo me volvió a poseer, diciendo que hacía tiempo que no singaba tan rico.
    
    Quedamos en que yo pasaría por su casa al día siguiente. Así fue como empecé a convertirme en el amante de Luis, el segundo amante porque él tenía uno oficial. Estuve frecuentando su casa, dormía siempre con él y casi había dejado a William y sus cosas a un lado. Un día pasaba yo por una de las calles detrás de la iglesia cuando William me llamó, me acerqué para saludarlo y me invitó a pasar.
    
    —¡Entra, chico, estamos aquí hablando!
    
    Traté de decirle que no, pero raro aunque decía que no, ya estaba yo en la sala y mientras William me presentaba a los demás.
    
    —Mira este es Paco, Lázaro, su gente Mario, Berto y yo, claro. ¡Caballeros, este uno de los mejores culos del pueblo!
    
    Así fue como me presentó, yo conocía a algunos de vista pero nunca había tratado con ellos. Bebían ron, me dieron mi trago, al parecer como la conversación ocurría en la sala no habría singueta y era solo ideas mías que siempre asociaba a William con cualquier orgía. Hablaban de todo y de nada a la vez, al rato llegó Hugo, al parecer quien esperaban porque tras él la puerta y la ventana quedaron cerradas. Yo quise irme, no sé, no me sentía como en mi sopa.
    
    —¡Coño, chico, qué vas a irte ahora!
    
    Me atajó William ...
    ... abrazándome, pasamos a una pequeña terraza donde ya algunos se desnudaban. William me susurró al oído.
    
    —¡Nos reunimos para singarnos a Mario, así que no te preocupes, solo si él no puede, tú puedes poner ese culito!
    
    Berto, ayudando a Mario a subirse en una mesa dijo como dirigiendo la escena.
    
    —¡A ver, caballeros, Mario es el culo y entonces tú, pones la boca! ¿Qué opinan?
    
    Claro que todos se apuntaron al igual que Mario. Berto me hizo arrodillarme en el centro y me vendó los ojos, era un juego, escuché que a Mario también se lo vendaban, consistía en que después teníamos que adivinar quién era quién. Por delante de mí pasaron todos poniendo su pinga en mi cara, dando a que oliera, rozara y probara. En total cinco, de todos los tamaños y diámetros, después me quitaron la venda y estaban allí todos desnudos, primero Mario y después yo fuimos ahora mirando bien diciendo que número eran, es decir en qué orden habían pasado cuando teníamos las vendas. Mario acertó dos, yo tres por lo que gané yo el derecho a comenzar la tanda de mamadas. Quise elegir a otro, pero elegí a William, sabía que le iba a gustar.
    
    —¡Ya lo dije yo, este es maricón de pura cepa! —dijo William acercando su pinga para que yo me la tragara delante de todos.
    
    Berto se había puesto a mamar el culo de Mario que había vuelto a ocupar su lugar en la mesa. Siendo yo el que mamaba, era como quien preparaba a quien se singaría a Mario, por lo que William fue el primero, yo elegí a Paco después porque tenía una ...
«1234...8»