1. Una nueva vida


    Fecha: 02/05/2023, Categorías: Hetero Autor: JulioG, Fuente: CuentoRelatos

    ... marrón claro y su piel morena, su colonia cuando lo tengo cerca, su altura, no sé, se me mezclan muchas sensaciones. ¿Él será así por el recuerdo de mi padre?
    
    Debo trabajar más rápido, he hecho pocos clientes hoy, pero ya es el almuerzo y aparece Héctor con la comida, le digo que estoy ocupada, que no voy a almorzar hoy. Se acerca corriendo mi lista de clientes y poniendo la bandeja en la mesa.
    
    -Eres muy insistente. ¿Lo sabias?
    
    -Claro, por tu cara intuyo que no estás bien y además quiero conocerte.
    
    -¿Tu mujer que dirá?
    
    -Si la tuviese te lo respondería. Además no creo que se enojase si supiese como eres, mira nada más esas tetas apenas las puedes contener en ese vestido.
    
    -Que diría si supiese que tiene un bulto debajo del pantalón que no es por ella.
    
    Héctor se miró y contrariado cuando se dio cuenta que era mentira siguió hablando como si nada, charlamos de mi padre y mi familia, cosas sin importancia, aunque alguna insinuación sí que hubo, luego seguimos trabajando ya cada uno en su despacho hasta que me tuve que ir.
    
    Son las 22, me encuentro acostada en el sillón relajada y me suena el timbre. Ya me había puesto cómoda con una camiseta y un pantalón corto. Mi sorpresa es mayúscula al descubrir que es Héctor, así que le abro por dentro y mientras sube a mi piso intento ordenar mi pelo en el espejo, ya no me da tiempo a cambiarme de ropa.
    
    -Nunca te cansas.
    
    -Vaya que hermoso escote -dice mirándome lascivamente- quisiera poder ver debajo.
    
    -Oye no ...
    ... te pases –le digo sonrojándome.
    
    -Vale no te enojes, he traído tu comida.
    
    Estuvimos cenando de forma improvisada, charlando y conociéndonos. Las miradas se cruzaban con cierto aire de seducción. Notaba como intentaba mirarme con disimulo mi escote. Esta vez eso me hacía sentir bien en ese momento de bajón. La conversación fue más fluida de lo esperado. Le conté como fue que me quedé soltera y sonrió.
    
    Ya sentados en el sofá, no recuerdo que hora era cuando me preguntó si me gustaba más besar o que me besen y le respondí que besar.
    
    -¿Y si me lo demuestras? –me pregunta clavando sus ojos marrones en los míos. En ese instante no sé cómo reaccionar ante su demanda. No me esperaba su atrevida propuesta. Solo sé que veo cómo se va acercando a mí y cuando lo tengo a unos centímetros de mi cara sintiendo el olor penetrante de su colonia, me resulta irresistible pegar mis labios a los suyos. Es ahí cuando noto como abre su boca y siento el contacto de su lengua, lo que provoca que me sume a su pasión abriendo la mía y enredando nuestras lenguas.
    
    El beso no es muy largo, pero si es intenso y húmedo y me hace sentir una sensación agradable en mi cuerpo. Un cosquilleo interno que hacía tiempo que no sentía. Sus labios entonces se deslizan por mi cuello haciendo que se me erice la piel. Y siento sus manos recorrer mi espalda hasta llegar a mi culo. Yo también lo abrazo acariciando su nuca para volverlo a besar. Ahora es más lascivo el beso. Mete su lengua en mi boca y luego ...