1. Ella: Levante


    Fecha: 02/03/2023, Categorías: Sexo en Grupo Autor: Hansberville, Fuente: CuentoRelatos

    ... desapareciendo y la fuerza de ββ hiciera mella en su físico cayó rendida sobre el amplio colchón:
    
    -vístete, hay un coche esperando para llevarte al aeropuerto. –su amigo nacho le hablaba de manera imperativa.
    
    Ella estaba completamente desnuda y sintió algo de pudor ante su amigo, aunque éste no le prestaba atención. Se movía nervioso por la estancia y parecía intranquilo. Pero bueno, pensó ella, con lo que se habría metido durante la juerga lo mínimo que debía estar era un poco nervioso. La mujer se vistió y tomó su pequeño trolley. Se encontraba tan cansada que tan solo se lavó la cara y se colocó sus grandes gafas de prada para cubrir su rostro sin maquillar. Se movía de forma autómata, casi zombie. Incapaz de recordar con claridad nada de la noche anterior. Tenía un fortísimo dolor de cabeza. Notó algo de jaleo en la casa y nacho le metía prisa para que fuera al coche. Ella estaba algo desconcertada pero en su estado de somnolencia, era incapaz de rebatir nada y actuaba según le ordenaba su amigo. Cuando llegaron a la puerta del palacio había un mercedes clase s negro con las lunas traseras tintadas esperándola:
    
    -luego te llamo, guapa. No te preocupes por nada –y le dio un beso en los labios.
    
    La periodista no sabía como interpretar nada de todo aquel despertar tan raro. Durante el trayecto dio un par de cabezadas. Necesitaba dormir. La noche había sido demasiado de todo... Larga, sexual, viciosa,... Y ahora necesitaba dormir.
    
    Cuando llegaron al aeropuerto, ...
    ... bajó del coche con su pequeña maleta y se dirigió a la zona de embarque. Recordó que nacho le había dicho, en algún momento desde que se despertó que tenía una reserva para el vuelo de las 11,30 hacia Madrid. Ella no se preocupó en cómo se había conseguido tan rápido y solo pensó lo poderoso que es “don dinero” y que el jeque lo tenía por castigo. Mientras esperaba la hora del embarque, se acercó a una de las múltiples cafeterías del aeropuerto y pidió un café solo. Al oírse la voz le pareció de ultratumba y pensó que así no podría presentar un informativo. De repente un pellizco en el estómago le hizo temer que fuese lunes y tuviera que aparecer por la televisión. Se tranquilizó al ver en el reloj de la cafetería que era domingo. Había perdido por completo la noción del tiempo. Recordaba el informativo del viernes en valencia como si hubiera sido una semana antes. Volvió a dormir durante la hora y media de vuelo entre son sant joan y barajas pero no fue suficiente. Así que cuando el taxi que la trasladó desde el aeropuerto madrileño la dejó en su casa a las dos de la tarde lo único para lo que tuvo fuerzas fue para tirarse en su cama y dormir.
    
    Al despertar todo estaba en silencio y a oscuras. No lograba ubicarse. Estaba cansada. No sabía cuánto tiempo había dormido. Giró la cabeza hacia un lado y vio el despertador digital. Eran las nueve de la noche. Hizo un cálculo mental y dedujo que había dormido durante siete horas y aun así se sentía cansada. Se incorporó, de repente ...