1. Amigos para siempre: Resucitando la pasión


    Fecha: 20/02/2023, Categorías: Anal Autor: enredada, Fuente: CuentoRelatos

    ... más. Raquel me miraba alucinada, con mis dedos aún dentro de su culo pero inmóviles pues solo podía pensar en esa polla que me taladraba y me hacía enloquecer. Yo gritaba pidiendo más y más. Lo sentía todo centuplicado, la vibración en mi coño, su polla en mi culo, sus pelotas resonando contra mis nalgas... y me corrí, me corrí de una forma escandalosa y brutal dejando a mi amiga boquiabierta.
    
    Me hice a un lado rápidamente dejando a Mario con la polla apuntando directamente a las piernas abiertas de su esposa, su expresión era febril, tenía el rostro desencajado y las gotas de sudor le corrían por la frente. Se quitó el condón en un visto y no visto y se acercó a ella, dudando, casi como pidiendo permiso. Fue ella la que tiró de él, fue ella la que apuntó a su culo dilatado, fue ella la que se zambulló a ese placer inmenso que tanto tiempo se habían negado. Los vi retorcerse, entregados el uno al otro, elevándose los gritos de ella hasta la locura. Mirándose como solo saben mirarse los enamorados. Perdidos en las sensaciones de dos cuerpos que encajan a la perfección. No podía dejar de sonreír al verlos así.
    
    Salí sin hacer ruido, aún me temblaban las piernas. En la cocina busqué un zumo en la nevera, el piso era grande y sus gemidos me llegaban en un rumor apagado. Saqué el huevo de mi vagina y lo lavé con cuidado en el fregadero guardándolo en su envase. Recogí mis cosas, me vestí como pude y abandoné la casa.
    
    Ya amanecía, el cristal de mi coche aparecía perlado de gotas de rocío, me senté y puse la radio regalándome unos instantes de reflexión... Pensé en mi pareja, en mi amor. Posiblemente ya se habría ido a trabajar. Yo también estaba dispuesta a todo por mantener viva nuestra llama. Estaba segura de que ese fin de semana que planeábamos escapar nos devolvería las ganas y la pasión perdida. Pero si no era suficiente siempre podía pedir ayuda a una buena amiga y es que la amistad todo lo puede. ¿No creéis?
«12345»