1. Los minutos de la imaginación (Crónica de una cornamenta)


    Fecha: 29/01/2023, Categorías: Infidelidad Autor: Passivepassion, Fuente: CuentoRelatos

    ... seguir.
    
    ─Está bien amor.
    
    Y luego le mande un gif con una cabeza de vaca y unos cuernos enormes diciendo muuu. Ella rio.
    
    Dieron las siete de la noche, pasé por ella al hotel, estábamos en el centro de la ciudad, me esperaba afuera del hotel con Pedro Jaime, me paré frente a ellos. Ella se volteó a verlo y le dio un largo beso. Luego, él, como todo un macho se acercó a la ventana y me dijo:
    
    ─La dejé bien repleta de semen cornudo, espero que lo disfrutes.
    
    Me guiñó un ojo y se fue, no sin antes darle otro beso a mi querida Eugenia.
    
    Cuando llegamos a casa, se fue la nana y el niño se quedó viendo televisión. Yo no aguanté y le comencé a preguntar qué había pasado.
    
    Lo primero que me dijo fue ─traigo todo el vientre lleno de semen seco de él, mi culo está repleto también y mi boca estoy segura que sabe a su pene.
    
    No pude más, me abalancé sobre ella y la comencé a desnudar, le quité la blusa y besé su vientre como un desesperado, la lamí. Recorrí su vagina y su ano de una forma tan sumisa como un perro le es a su amo. Sabía a él, tenía perfume de él; cuando la besé, noté un cierto sabor extraño que no pude distinguir bien. Sabía cómo a piel, o a macho, no sé. Terminé rapidísimo, Eugenia me miró con ojos tiernos y me dijo: ─acabas de entregar a tu mujer al que alguna vez fue su amante, eso me da gusto, me siento bien, te quiero más, siento que puedo ser yo, y tengo el deseo de relucir toda mi sexualidad y mi pasión con Pedro Jaime, te amo Diego.
    
    Luego, ...
    ... vendría lo que sería la coronación de mi condición de cornudo sumiso.
    
    ─Prepárate por que te tengo una sorpresa cornudito.
    
    ─¿Qué? ─contesté desesperado.
    
    ─Grabamos todo, así que no será necesario que te lo cuente con lujo de detalle, podrás ver y oír cada cosa y cada palabra de lo que sucedió.
    
    Me quedé viéndola con una mirada de quien es humillado de la forma más cruel, casi se me salen las lágrimas, entonces ella solo dijo:
    
    ─Ve a tu computadora, ponte los audífonos y prepárate para ver, disfrutar, sentirte humillado y gozar al ver cómo me cogió Pedro Jaime, ahí está todo el video en tu correo. Voy a ver televisión un rato, y a cenar un poco, cuando termines me hablas.
    
    A continuación, voy a narrar cada detalle de las tres veces que él descargó su furia y su semen en ella, y algunas partes de la plática que tuvieron entre cada sesión.
    
    Al entrar a la habitación Eugenia ya tenía lista la cámara, busco un lugar estratégico y la colocó. Apenas lo hizo, se fundieron en un tremendo beso, podía ver claramente cómo se enredaba su lengua y su boca en la de él. No habían pasado más de tres minutos y Pedro ya le había arrancado la blusa y quitado el sostén, ella le bajo el pantalón y se hincó frente a su pene, él la cogió de la cara y le dijo ─no, primero me vas a lamer el culo, quiero que tu esposo sienta mi olor cuando te bese─. Ella, obediente, sin decir palabras se lo comenzó a lamer, poseída, metía su lengua hasta donde más podía, él solo le gritaba ─¡Así! ¡Lámelo ...
«1234...»