1. Mi hermana Noe y yo, en un resort sexual


    Fecha: 16/05/2022, Categorías: Incesto Autor: MikeFed, Fuente: CuentoRelatos

    ... le besaba y acariciaba esos pechos imponentes.
    
    Mi chico, en cambio, estaba tranquilo, me abrazaba, nos besábamos y no pasaba de ahí. Eso, hasta que me agarró por la espalda, me apretó las tetas y apoyo su pene en mi culo. Estando flácido aún era de un tamaño importante. Debo decir que me preocupó al pensar en cuando estuviera firme.
    
    Almorzamos y cruzábamos miradas. Noe fue a su dormitorio y yo me quedé con él en el living. Me empezó a besar, a acariciar, y en pocos minutos me tenía desnuda, en cuatro, con mi culo al aire. Comenzó a jugar con sus dedos y lengua en mi vagina, mi clítoris y mi ano. Yo estaba muy caliente y mis jugos lubricaban perfectamente mi vagina. Metía y sacaba sus dedos con una velocidad tremenda de mi vagina, mientras su lengua perforaba mi ano. “Por dios, si su lengua tiene ese tamaño y fuerza lo que será su aparato”. No tardé mucho en descubrir que medía unos 23 cm y era bien grueso. Desesperada me puse a chuparlo mientras él se recostaba y me miraba.
    
    “Quiero que te toques”, me dijo, firme y con tranquilidad. No pude menos que hacerle caso, me gustó que me indique que quería. Yo me frotaba, y chupaba al mismo tiempo. Para que viera todo, me puse paralela a su lado, y el veía como me frotaba y lo chupaba. “No te vas a meter dedos?” Ahí fue el primer orgasmo. Me sorprendió, era la primera vez que un hombre me decía que hacer, yo obedecía, me volvía loca y tenía orgasmos.
    
    “Chupa tranquila y despacio, tenemos mucho tiempo”. Claro, él lo decía ...
    ... pero yo estaba a mil. Ya con tres dedos en mi vagina casi imploraba mentalmente que me la meta. En vez de eso, acariciaba mis pechos, y pellizcaba mis pezones. Mientras me pellizcaba un pezón y me hacía doler un poco me dijo “Y nada más que adelante los dedos, yo pensé que te gustaba compartir”. Fue escucharlo y meter uno en mi culo, dejando dos en mi vagina. Cada vez más lujuria y placer. Me dominaba mentalmente, el poseía mi voluntad, y lo peor, es que me gustaba, me volvía loca.
    
    Me tuvo así un rato, y a esta altura había perdido la cuenta de los orgasmos que llevaba entregados a ese hombre. De pronto, se paró al lado de la cama y me dijo “Ahora, ponete de rodillas y una mano se ocupa de tu culo y otra de tu conchita”. Lo hice, pero creyendo que era pícara, solo metía un dedo en mi culo. Él me puso la pija en mi boca y me bombeaba lentamente. Cuando notó mi trampa, se corrió para atrás y me dijo
    
    “Dos, o veras como me masturbo hasta el final, sin que puedas siquiera tocarme.”
    
    “No, por favor, eso no” Dije. Y no solo metí dos dedos sino que en dos minutos tenía tres.
    
    “Ahora tengo tres, me metí tres para vos”. Estaba desenfrenada. Volvió a acercar la pija a mi boca y comenzó a hablarme: “Veo que te gusta gozar, y que estás muy caliente” “Me gustan las mujeres calientes” “Cuando están así es cuando verdaderamente gozo”
    
    Yo explotaba cada dos segundos en un orgasmo. Me hizo dar vuelta, poner el culo hacia él y me metió solamente la cabeza en mi vagina. La metía y la ...
«1234...»