1. Gordas a mí


    Fecha: 20/11/2021, Categorías: Confesiones Autor: Rbb27, Fuente: CuentoRelatos

    ... con eso y volvimos a quedarnos unos minutos en silencio.
    
    Me dijo que si quería tomar un café al día siguiente, para vernos y conocernos un poco, decía que no teníamos que follar ese día. Le contesté que sin problema, me parecía bien. Me mandó la dirección y quedamos por la tarde. Estaba seguro que me la iba a follar ese día, noté que estaba un poco desesperada, estaba deseando que la follaran y sabía que me la iba a llevar al huerto, seguro que no estaríamos lejos de su casa.
    
    Llegué puntual, sin llegar a entrar en la cafetería esperé sentado en unas mesitas altas del exterior, la vi llegar de lejos, las fotos no engañaban, preciosa, pero gordita, vestía un pantalón vaquero, estaba embutida en él y lo llevaba subido hasta el ombligo, no podía disimular el enorme culazo que tenía, sus grandes tetas se apretaban metidas en un body rosa, conocía la prenda, he desabrochado algunos corchetes, llevaba también una chaqueta rosa de punto para intentar taparlo todo, misión imposible. Para nada era mi tipo, nunca me había fijado en una chica gorda.
    
    Sabíamos quiénes éramos, yo la reconocí de lejos aunque ella se hizo la despistada, la llamé y se acercó, estaba avergonzada, se notaba que estaba muy acomplejada, no puedo describir la ternura que me género, la agarré de su ancha cintura y la di dos besos, asegurando que el segundo tocará la comisura de sus labios, se puso roja.
    
    Nos sentamos, intenté que se sintiera cómoda, la decía que era una chica guapísima y que aunque ...
    ... estaba gordita yo la veía estupenda, llena de curvas y recovecos para explorar. Ella se reía y empezaba a sentirse más a gusto, dejó de estar pendiente de sí alguien nos miraba y se centró más en mí, por fin.
    
    Estuvimos un par de horas sentados charlando y riendo, lo estábamos pasando muy bien y la besé en la boca, me miró sorprendida y volví hacerlo con mi mano en su muslo, la dije: "vamos a tu casa", me dijo: "vamos". Decía que vivía a 10 metros y aproveché el camino para meterle mano, le tocaba el culo y metía la cara en sus tetas, todo era enorme para mi mano, estaba muy cachondo y ella también.
    
    Cuando llegamos no frené y quería quitarle el pantalón con la cara en sus tetas. Me paró y me dijo que iba a ponerse cómoda, comprendí que no quería que la viera sacándose el pantalón. Me quité la ropa y me quedé solo con los calzoncillos, esperé impaciente y algo empalmado a que saliera del cuarto. Tardo unos minutos pero mereció la pena, llevaba un camisón corto transparente que terminaba donde empezaban sus bragas blancas engullidas literalmente por su cuerpo, las tetas libres parecían dos enormes gotas de agua, quería chuparla, besarla, quería comérselo todo, esa niña gordita me tenía a 100.
    
    Me puse de pie, se acercó y empezó a besarme mientras me tocaba el paquete, la tenía tiesa como un bate y ella apretaba excitadísima, hacía mucho tiempo que no tocaba una polla. Me bajó los calzoncillos y me sentó en la cama, se arrodilló en el suelo entre mis piernas y empezó a lamerme ...