1. Ardor en el extranjero


    Fecha: 27/10/2021, Categorías: Hetero Autor: Anónimo, Fuente: RelatosEróticos

    ... al apartamento y comenzó la aventura: Indiana Jones. A mitad de la peli, la parejita se aburrió y se fueron a un sitio con más intimidad. Mientras tanto Samuel y yo seguíamos en aquel sofá. La tensión se podía palpar. Pero ninguno de los dos quitábamos la mirada de aquella pantalla. Finalmente, Samuel puso su mano sobre mi rodilla, sintiendo la textura del panti. Iba subiendo poco a poco con timidez, luego retrocedía. Empecé a notar ciertas palmadas, y no, no procedían de nuestras manos. Se me pasó por la mente hacer lo mismo, pero sin retroceder una vez que mano estuviera arriba, aunque quizás era demasiado atrevido. Paré su mano con la mía. Él me miró, en silencio. Nuestras bocas se fueron acercando hasta al fin unirse. Por desgracia no hubo más que cuatro besos tontos cuando había amanecido .Entonces me llevó a casa.
    
    - Qué pasa, ¿no me vas a dar tu número?-Me dijo mientras salía del coche-.
    
    - Aquí tienes. Respondí.
    
    Ya en el apartamento recibí un mensajito: “Beso”
    
    No recibí noticias suyas hasta las siguientes dos semanas que nos encontramos en la fiesta de uno de sus amigos.
    
    -Hey Marta, cuanto tiempo.
    
    -Hola –Le hice un intento de sonrisa-
    
    -¿Por qué no me escribiste?
    
    -¿Por qué no lo hiciste tú?
    
    -Bueno mira, me gustaría seguir en contacto contigo, ¿te podré llamar la próxima semana?
    
    -Venga va.
    
    Todo fluyó rápidamente, en menos de lo que pensaba estaba pillada por aquel tío. Durante tres meses todo fue alegría y algún que otro orgasmo. Me ...
    ... recogía de la uni y me llevaba a algún lugar donde me dejasen entrar con mis pintas de hippie. Escuchábamos música en el coche a todo trapo mientras me decía: “ Daaaaaaaale” y gritábamos como locos viendo los partidos de fútbol.
    
    Durante estos meses, no creáis que olvidé a mis dos joyas. Seguíamos disfrutando cada día en la uni de esos sándwiches raros pero deliciosos que hacían en la cafetería. Nunca se habló de aquel día, lo respete, además yo también tenía cosas que esconder.
    
    Ellos no conocían a Samuel, supongo que eran personas “non gratas” por no ser de su “rollo” -sí era un capullo en muchos sentidos- Pero a ninguno nos importaba. Siempre he sido una gran defensora de separar amigos y pareja.
    
    A una semana de abandonar aquella ciudad, uno de los flipaillos del básquet montó una fiesta en su casa, obviamente nos podías encontrar a todos allí. La conquista de Noelia, no paraba de mirarme y de sentarse o ponerse a mi lado. Fue algo extraño pero no lo di importancia. Pasadas unas horas, íbamos todos un poco pasados cuando Edu, -la conquista- se me sentó encima e hizo el intento de darme un beso. Hacía tiempo que no hacia una cobra tan precipitada.
    
    -¿Qué haces? Le dije
    
    -Darte un beso, ¿No puedo?
    
    En ese momento Noelia apareció enterándose de todo el percal, enfadada le dio una bofetada a Edu y le dijo a Samuel: “¿Qué pasa? ¿Es que te da igual?” A lo que éste contestó: “Compartimos todo desde niños.” Noelia se piró súper mosqueada.
    
    Y ahí estaba yo en medio de todo ...