1. El señor de 53 años


    Fecha: 29/09/2021, Categorías: Sexo con Maduras Autor: subtitulados, Fuente: CuentoRelatos

    ... me aguante el grito, la metió de un solo golpe, mi ano estaba poco lubricado y me dolió, pero ni de loca quería que me la sacara, yo quería que me estrujara y me partiera, quería ser suya, ¡quería ser su puta!
    
    L. Agh, así, me duele, agh!
    
    M: ¡Ah, esto es la gloria, agh!
    
    L: ¡Empújala, muévete rápido, agh!
    
    M: ¡Nena, hace años no hacia esto, que culo!!
    
    Mario estaba poseído, el hombre recatado había quedado atrás, ahora una bestia sexual de 53 años había aparecido, una bestia con sexo reprimido que se estaba liberando y me estaba partiendo el ano de una forma muy rica!
    
    M: ¡Que culona, que piernas, agh, el sueño de todo hombre!!
    
    L: Papi, mas, dame duro, agh, no me tengas piedad, desquítate, agh, párteme
    
    M: ¡toma, toma puta, agh!
    
    L: Si soy tu puta, agh, cógeme, ¡cógete a esta perra puta!!!
    
    El me embestía fuerte pero delicioso, yo jadeaba del placer, él no se quedaba ataras, movía mi cadera, quería sentirlo, ¡quería sentir su rico semen dentro de mí!
    
    M: ¡Hermosa me voy a venir!!
    
    L: Lléname de ti nene, agh, ¡dame tu leche!!!
    
    M: ¿Quieres leche?
    
    L. Si!!! ¡Dame todo tu rico semen!!
    
    M: ¡Ahí va, uf, agh!
    
    L: ¡Si, así, que rico, que rico dios!!!!
    
    Mi ano se llenó de su rico semen, mi vagina también escurría, ambos líquidos escurrían por mis piernas, quedamos pegados como perros, ¡el atrás de mi casi a punto del desmayo!
    
    Finalmente, después de que paso el orgasmo, nos vestimos, el caballerosamente m ayudo a vestirme, pase al baño a retocarme, el pago la cuenta y me dejo en la esquina de mi casa, nos despedimos con un muy rico beso, su mano toco mis piernas y con una sonrisa deje su auto.
    
    Después de esa magnífica noche, continuamos escribiéndonos y contando nuestros problemas el sigue siendo mi amigo y espero en algún momento tener la oportunidad de estar con él, pero en un lugar más cómodo, ¡para sentir de nuevo su rico cuerpo y su experiencia!
    
    ¡Saludos su amiga Lety!
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