Memorias inolvidables (Cap. 7): Dos años y medio con Eduardo
Fecha: 22/09/2021,
Categorías:
Gays
Autor: janpaul, Fuente: CuentoRelatos
... novias…, para vosotros, que sois gays, ¿no? —asentimos con la cabeza— diría que son más adecuados estos de esta parte, pero de gustos los vuestros y no lo tenéis malo, por lo que veo.
Estábamos mirando y mirando y haciendo preguntas de respuesta obvia como las típicas: «¿esto se puede grabar?, ¿cuánto tiempo tardarías en hacerlo?, ¿el grabado es por dentro o por fuera?, ¿qué tipos de letras tenéis?
El chico contestaba a todo con paciencia y nosotros tardábamos en decidirnos. Hablamos un momento entre nosotros si podríamos ver en otra joyería y acabábamos diciendo que no. Algo escucho el chico que dijo:
— Yo soy gay, podéis ir a las otras joyerías, no tengo problema, pero ya sé qué pensáis y os espero aquí.
— Entonces no nos vamos. Oriéntanos para que nos decidamod.
— Ahora tenéis que pensar hasta cuánto queréis gastar y luego vemos los trabajos y los materiales.
— A mí me gusta este, y si tienes los dos nos los quedamos, —dije totalmente decidido.
— Hoy no podemos tener dos, porque ninguno se repite, además tengo que mediros el dedo y si los queréis grabados elegir entre los seis tipos de letras, pero en dos días, el viernes los tengo aquí, pero eso sí, tenéis que darme la señal.
— Si crees que puedes cumplir, te lo pago ya, —le dije.
— Necesito vuestros nombres y teléfono para avisaros, si vivís cerca hasta yo mismo los puedo llevar y ahora a medir, en qué dedo lo queréis.
Nos quedamos mirándonos, sin saber qué dedo elegir.
— ¿Pensáis casaros ...
... alguna vez por el juzgado o notaría?, —preguntó.
— Jamás de los jamases, nuestra palabra vale más que la palabra de un juez o notario o alcalde y concejal.
— Yo haré lo mismo, entonces en el anular de la izquierda, ese dedo con contiene la vena del amor ˝vena amoris˝ y conecta con el corazón. Esto es tradicional, pero cualquiera sabe.
— Pero me gustan las leyendas aunque sean falsas —dice Eduardo y añade en voz baja—, ¿pagamos entre los dos?
— Esto lo paga mi padre que me ha hecho este obsequio, —digo mostrándole la tarjeta.
Nos estaba midiendo los dedos con dos cosas diferente, primero una cinta que se ajustaba y preguntaba si apretaba o iba bien y cuando le decíamos que no molestaba, hacía la medida con unas secuencias en espiral o helicoidal y comparaba. Cuando le dijimos donde vivíamos, nos dijo:
— Soy José Alpuente, allí vive mi abuela. El viernes os aviso, si queréis venir me decís la hora y si lo preferís, sabiendo que ya los tenéis aquí, el sábado os los llevo a personalmente y voy a visitar a mi abuela.
— Perfecto, genial, si cumples este encargo te invitamos cuando vengas.
— Yo os avisaré donde estoy en mi coche, os venís allí, que debo probaros para que coincidan las medidas y daros unas indicaciones. Habéis escogido plata pura y tiene incrustaciones valiosas, pero no tendréis problema. Ya os felicitaré el sábado. Estad tranquilos, no suele haber errores ni demoras en este servicio.
Habíamos estado casi dos horas con José y ya le tomamos ...