Pregunta Comprometida 4 - Relatos Eróticos

Pregunta Comprometida 4

... «Mami me dejó venir antes que viniera ella, más tarde. Ella siempre me hace dormir la siesta a esta hora… ¡Jajaja! ¡Le dije que venía a dormir con vos! Mami se mataba de risa y me dejó. ¿Lo hacemos de nuevo?» «¿Lo qué?» «Lo que hicimos ayer…» «Pero… tesoro…, tengo que hacer el dibujo. Ayer no hice nada.» «¿Cómo qué no? Cuando me dormí seguro que hiciste algo. No seas malito. ¡Juguemos! Y… además me prometiste que me ibas a decir que te pasó.» «¿Cómo qué me pasó?» «Claro, cuando te manchaste y fuiste al baño. ¿Qué fue eso? ¿Te acordás? Me dijiste que me dirías…» «Es que…, bueno…, a los varones nos pasa lo mismo que a las mujeres… Cuando nos gusta una cachuchita, como la tuya, por ejemplo, también tenemos orgasmo… y… eyaculamos…» «Aaahh, ahora entiendo…» «¿Qué cosa?» «Que mami le dice a papá, “dame la lechita papi, me gusta mucho, es muy rica… Yo eso no lo vi bien. Pero… me pareció así en la oscuridad…, que mami estaba acostada y papá sentado encima de ella…, casi sobre las tetitas…» «Si, puede ser… pero…, bueno a mí me pasó que como me gustó mucho tu cachucha y tu juguito…, tuve ganas de… bueno… largar la lechita…» «¿Sí? Y… ¿puedo ver?» «¿Qué cosa?» «Y… tu pistolín…, cuando tenés juguito…, lechita digo… ¿Puedo ver? ¿Me dejás?» «Pero Mica…, no puedo…, no me puedo desnudar…» «No hace falta. Dejame que lo vea…, sacalo por la pierna del pantaloncito…, es ancho…» Mica era muy observadora. Es cierto podía sacarla por allí…, pues… ¡para evitar accidentes peores no me puse ...

... calzoncillo! ¡Para colmo las palabras de la nena me habían puesto al palo! «Dale, mostrame. Mirá que grande que está. ¡Cómo se nota! ¡Cómo cuando yo estaba sentada encima de vos! Dale, mostrame.» «Está bien.» Metí la mano entre la pierna del pantaloncito… «¿Me dejás que la saque yo? Mami se lo hace a papá. Le saca el pistolín por la bragueta del pantalón.» Retiré la mano y dejé que ella lo haga, ¡Sabía que iba a acabar de inmediato! «¡Uy dio! ¡Qué linda… ¡y tenés juguito!» Por supuesto, ya estaba mojada. Luego me enteré que eso se llamaba pre seminal. En ese entonces todavía tenía prepucio…, y lo retiré para que vea el glande. «¡Qué lindo, cómo brilla!» «Es por el juguito…» «¿Eso es la lechita?» «No, no, eso sale antes…» «¿Y por qué?» «Porque vos son… tan… cariñosa…, que me hacés tener ganas… ¿Tenés ganas de que te bese otra vez?» «¡Si, qué lindo! Pero primero mostrame bien…, como te sale la lechita…» «Bueno…, a lo mejor cuando te bese.» «Bueno, dale.» Sin dudar, se sacó la bombachita y la puso bajo el colchón. «Dale, subime.» La levanté hasta el tablero. La pija quedó afuera, dura y descubierta. Mica abrió las piernas y se recostó sosteniéndose con sus brazos. «Quiero ver. En cuando te salga la lechita mostrame.» «Si, mi amor, te muestro…» Y me agaché a chupar…
“Creo que lo hice mejor. Sin siquiera haberla tocado Micaela tenía la conchita mojada. «¡Qué rico, qué rico!» Ahora sí, busqué con la lengua el agujerito y la metí un poquito… «¡Aaaahhhh!» ¡Me largó todo! 
-¡Recontra calentona ...