De Sexo, Drogas y Otros Placeres (Parte 4) - Relatos Eróticos

De Sexo, Drogas y Otros Placeres (Parte 4)

... sus jugos seminales sobre mí ya de por si empapada lengua.
-Que rica putita. ¿Quién hubiera dicho que un cabrón vestido de mujercita sabría dar tanto placer?-Expreso Sabras mientras sacaba su pito para volverlo a introducir de golpe entre mis labios carmesí. Mi lengua rápidamente se acomodó a su tronco, envolviéndolo con firmeza para recorrerlo a lo largo y ancho, mezclando saliva y semen en un sabroso líquido que me permitía humectar mi boca y masajear fácilmente su grueso trozo, mismo que podía sentir parecía a punto de correrse. Yo solo daba arcadas mientras trataba de seguir el ritmo que él me imponía con sus movimientos de cadera y el constante empujar de mi cabeza, sin dejar de masturbar mi ¨cosita¨, también húmeda con sus propios líquidos, como loca. En todo momento podía saborear el semen que escurría por mi garganta y percibir las palpitaciones de las venas que hacían latir su pene dentro de mi boca augurando una pronta y torrencial corrida. Ansiosa por recibir su descarga de leche y así alcanzar mi propio orgasmo al saberme tan buena mamadora, pues ambas manos sobre mis nalgas sin dejar de succionar o lamer por un par de minutos, para finalmente, sacar su pene lenta y delicadamente mientras lo veía a los ojos como provocándolo a hacer lo que deseara conmigo. Una vez saque su pito de mi boca deje salir un afeminado y profundo ¨ahhhh¨, como quien vuelve a respirar después de estar bajo el agua o quien sostiene la respiración por varios segundos.
-Vaya, eres toda ...

... una experta comiendo pito. Eso de chupármela sin meter las manos se verá increíble en el video, como toda una profesional.
-Gracias amor, tienes una riata deliciosa, podría estar lamiendo y chupando todo el día-le respondí sin dejar de masturbarlo ahora con ambas manos.-Parece que ya está por estallar, ¿quieres venirte en mi boca otra vez papi?
-Uyyyy me encantaría chiquita, pero esta te la estoy guardando para otro de tus hoyitos jajaja. Dame unos segundos que ya casi me haces acabar; mejor anda, atiende a Pipe un rato, deja me repongo chiquita-Dijo mientras pasaba su mano por mi barbilla.
Pipe había regresado y ahora entendía que fue a buscar tan diligentemente: en sus manos traía un dildo purpura de tamaño modesto y lo que parecía una botella de lubricante KY. El ver tales objetos trajo a mí los recuerdos de mis sesiones de masturbación anal en la privacidad de mi casa y de nuevo me temblaron las piernas por semejante prospecto de satisfacción y por un nuevo ¨levantón¨ del éxtasis y metanfetamina que recorrían mi cuerpo y mente.
-Párate Anel-dijo Pipe extendiéndome la mano- te toca gozar a ti muñeca.
Me puse de pie y de inmediato Pipe me tomo entre sus brazos para besarme profunda y hasta podría decir, románticamente. Claro, sus manos estaban en mi culo, frotándolo, pero lejos de darme un beso salvaje y tosco como antes, me mordió suavemente el labio inferior mientras con su lengua mojaba mi labio superior de forma tierna y sutil. Tal delicadeza me sorprendió un poco, ...