1. El bosque encantado


    Fecha: 04/01/2021, Categorías: Hetero Tus Relatos Autor: Caramelo, Fuente: Relatos-Eroticos-Club-X

    ... estado aguantando o esperando todas las horas del día, igual que yo. ¡Es riquísimo! ¡Lo chupé todo! Y refregué toda mi cara contra la concha ¡Grandioso!
    Por las dudas, en realidad para mayor “prestación”, al mediodía fui a una farmacia para buscar la pildorita “mágica”. Como ya lo había hecho en otras oportunidades, luego de precavida revisación del corazón, me tomé dos. Espero que alcance.
    Me paré y comenzamos a enjabonarnos, acariciarnos, ella tanteaba con sus manos mis huevos; yo sus tetas.
    -Ponete de espalda, tomate de las canillas. - Lo hizo y levantó bien el culo.
    -¿Me la vas a meter por la cola? - No lo dijo con miedo ni preocupada. Más bien por curiosidad.
    -No, no. Ahora no. Es que te quiero ver el hoyito mientras te cojo. Así es muy lindo.
    -Ah, que pícaro, pero yo no te veo nada.
    -Ya llegará
    Y apunté al bosque encantado. Encontrar el buco con la pija es más fácil que con la lengua. Entró sin ningún problema. Ella tenía suficiente flujos. Llegué al fondo y comencé el bombeo. 
    -Despacito.
    -¿Te duele?
    -No, para nada. Pero así dura más.
    -¡Jajaja! Está bien.
    A los cinco segundos llegó su primer orgasmo con la pija adentro. Tembló toda y sentí sus maravillosas contracciones.
    -¡Ay, nena, nena, me matás! 
    -¡Vos me matás a mí! ¡Ahahaha! ¡Acabo de nuevo!
    Y otro orgasmo más. Yo hacía fuerza para contenerme. Trataba de pensar en la guerra de Crimea…, en cualquier cosa, pero no había caso.
    -¡Nena, nena, me viene!
    -¡Esperá! ¡Esperá! ¡Adentro no!
    -¿No estás ...
    ... segura? ¿Querés condón?
    -No, no, por eso no tengo problemas. Tengo las pastillas. 
    ¿Qué me estaba diciendo? ¿Siempre está preparada por qué le gusta tanto coger? 
    -Lo que pasa es que quiero chupartela. Cuando estés por acabar avisame.
    -Bueno, sí. ¡AHORA!
    Ariadna se destrabó de mi pija. Se dio vuelta rápidamente, se agachó y se la metió en la boca. Me la agarraba con la mano para que no entrara toda.
    -No es que no quiera que la metas toda, pero prefiero tenerte para que no acabés directamente sobre mi garganta porque me da arcadas. Así la disfruto más.
    Y así fue nomás. Cuando salieron los chorros de semen ella manejaba la pija para derecha, izquierda, al centro, a la lengua, al paladar. Todo organizado. ¡Una belleza!
    Quedé temblando de lo bueno que había sido. ¡Esta nena es una artista! Se la tragó toda y se paró a besarme. 
    -¿Ves? Así es mejor. La aprovecho toda.
    Nos lavamos, nos enjuagamos, secamos, y fuimos a la cama.
    -¿Cómo querés? 
    -¿Cómo querés vos?
    -No, no, elegí vos. En el baño elegí yo. Ahora te toca  a vos.
    -Bueno, quiero verte. - Se acostó boca arriba y levantó las piernas. – Dale, ponete.
    Me instalé entre sus piernas, me las apoyó en los hombros, sonriendo estiró los brazos y me tomo la pija.
    -¿Ves? Ahora te veo bien. 
    -Yo también. Me encanta.
    -Sí, dale, métela.
    Coloqué la cabeza en el bosque y comencé a empujar despacito, como a ella le gustaba. Acaricié sus tetas. Con las rodillas esperaba mantenerme en equilibrio, pero en algún momento tuve que ...