La culona de mis sueños.
Fecha: 12/12/2020,
Categorías:
Erotismo y Amor
Tus Relatos
Autor: DANH, Fuente: Relatos-Eroticos-Club-X
... es que nunca nadie me había visto sin sostén.
En ese momento sentí que ya no podía contenerme:
-Bueno pues te ves muy bien sin sostén -le dije esperando que no me de una bofetada-
-En serio -me dijo soltando una pequeña risa-
En ese instante noté que me miraba con un toque de picardía...
-Pues...-ella continuó diciendo- ahora tampoco tengo.
Entonces ella se quitó la manta con que se cubría y me dí cuenta que, efectivamente no llevaba sostén; pues los pezones podían verse a través de la blusa. Entonces me quedé congelado sin saber como reaccionar hasta que ella me miró fijamente, entonces sin pensarlo más me acerqué y la besé con pasión, sentía la suavidad de sus labios,el aroma de su cuello; podía besarla toda la noche pues lo deseaba desde hace tiempo con locura. En ese momento ella me tomó del brazo y me dijo:
-Ven aquí
Entonces fuimos hasta su cabaña, al parecer ella estaba allí sola -para mi fortuna- aunque había una cama ella me llevó hasta una silla donde yo me senté, luego ella se paró frente a mi y con un suave movimiento se quitó la blusa. En ese momento pude ver de nuevo esos rosados pezones, ese precioso lunar en medio de sus pechos y esa piel blanca como ninguna desnuda frente a mi. Entoces ella se sentó de frente a mi sobre mis piernas y sin perder ni un segundo comencé a comer esos senos enormes, chupandolos con fuerza, mordiendo con suavidad sus pezones para luego chuparlos nuevamente. Entonces baje mis manos por su espalda hasta llegar a sus ...
... nalgas y comencé a apretarlas con fuerza. Entonces ella se puso de pie, se dio la vuelta dándome la espalda y entonces comenzó a bajarse el short lentamente para luego quitarse la ropa interior y quedar completamente desnuda frente a mi, luego se dio vuelta hacia mi, entonces me quite los pantalones; la tomé de la cintura y la acerqué a mi, ella abrió entonces las piernas instintivamente e introduje mi pene en su vagina, suavemente, sin apuro; era cálida y apretada, podía sentir como estaba mojada por dentro. Entonces ella me abrazó, sus senos estaban en mi rostro, mis manos en su cintura, nos miramos a los ojos y nos besamos profundamente, entoces ella comenzó a moverse hacia adelante y atrás primero lento y luego más rápido, podía sentir mi pene entrando y saliendo de su vagina, ella me tomaba de los hombros y se impulsaba con fuerza, yo la tomaba de la cintura apoyando sus movimientos, ella jadeaba y suspiraba a mi oido mientras sus senos se pegaban a mi, entonces ella comenzó a rebotar y rebotar sobre mi, el sonido de los gemidos que me regalaba se hacían más y más fuertes, entonces la miré y dije:
-¿Ahhh...no crees que...que nos escuchen?
-Estamos lejos -dijo ella entre jadeos-
Luego se detuvo y me abrazó con fuerza, entonces podía sentir su peso sobre mi, su piel cálida contra la mía y mi pene enterrado entre sus piernas. En ese momento ella se puso de pie y ambos sabíamos para que, sin que se lo pidiera ella se apoyó en la cama sobre sus rodillas y antebrazos, para ...