1. CHANTAJEANDO A PAPÁ I


    Fecha: 20/02/2020, Categorías: Gays Tus Relatos Autor: ANTONIO, Fuente: Relatos-Eroticos-Club-X

    Desde pequeño sentí un gusto que no podía explicar por los hombres, incluso mi papá con ese cuerpo peludo, piernas gruesas y voz grave, producía en mi algo que me recorría entero, y me quedaba viendo a papá cuando salía de la ducha sólo con la toalla puesta, corrían pequeñas gotas de agua sobre su pecho cubierto de pelos, a veces su toalla se corría y dejaba ver sus piernas también velludas, no me contenía y lo abrazaba, seguramente papá pensaba que era cosa de niño, pero en mi interior sabía que abrazaba a un hombre. 
    Descubrí la masturbación como a los 14 años por comentarios de compañeros de colegio,  yo era muy tímido por lo tanto escuchaba a mis amigos, pero no decía nada. Un día en mi habitación puse manos a la obra y con empeño logré tener mi primera eyaculación, fue lo más glorioso que descubrí y desde aquel día me convertí en pajero obsesivo, incluso me pajeaba en los recreos, en el baño.
    Por las noches, a veces estaba hasta la madrugada masturbándome una y otra vez, no podía parar, luego descubrí que mientras me acariciaba el cuerpo mi placer aumentaba y así fue como me desnudaba completamente y recorría mi cuerpo con mis manos, en una de esas ocasiones acariciando mis nalgas, mis dedos iniciaron un jugueteo en la entrada de mi culo, aquella sensación me hizo acabar largos chorros de semen sobre mi cuerpo que luego con mi mano esparcía por mi estómago y pecho, me encantaba sentir la leche en mi cuerpo, me gustaba su olor fuerte, su blancura. 
    Así empecé a jugar ...
    ... con mi culo, primero con un dedo a la entrada solamente, pero luego sentí deseos de más y mi dedo entraba en mi culo, más tarde fueron dos dedos que penetraban profundo en mi culo cada vez más ansioso y caliente. 
    Mi padre, que desde pequeño era mi objeto del deseo, al verme crecer fue separándose de mí, ya no dejaba que me sentara en sus piernas y me restregara contra él o abrazarlo cuando estaba sin camisa y darle besos en su pecho peludo.- ya estás grande para juegos.- me decía y me dejaba con las ganas de sentirlo cerca, así es que por las noches mis fantasías me envolvían y no paraba de meter mis dedos en mi culo y con la otra mano me pajeaba como si se fuera a acabar el mundo. Crecía y mis deseos de hombre crecían conmigo, pero mi mundo era muy pequeño, no conocía más que el colegio y mi casa, no contaba con los chicos del colegio, todos los que conocía era homofóbicos, decían cosas horribles de los gays y se jactaban de sus conquistas con las chicas del cole, así es que también me fui distanciando poco a poco de ellos, por otro lado mi papá ya no me veía como su pequeño niño al que permitía ciertas cosas, ahora era el adolescente al que preguntaba si ya me había acostado con alguna niña del colegio y esas cosas.
    Mi vida consistía en mi cama, desnudo tocándome, había empezado a practicar la autofelación y con esfuerzo un día logre recibir la leche directo en mi boca abierta, disfruté lentamente aquel líquido, gota a gota hasta tragarlo todo. 
    Como a los 16 años ya no ...
«1234...7»