1. El curita me vuelve dar por el culo.


    Fecha: 21/01/2020, Categorías: Gays Tus Relatos Autor: Danisampedro91, Fuente: Relatos-Eroticos-Club-X

    ... tiraba por mí.
    
        Al llegar al baño, abrió las puertas de la mampara de la ducha, metió una banqueta que tenía en el baño, y después de abrir el grifo de la ducha y esperar a que el agua se regulase, me ordenó sentarme en la banqueta, me levantó las piernas, y haciéndome que las abriera, se agachó empezando a lamerme el ano. 
       ¡Ohhh! ¡ohhh! Gemí al notar su lengua en mi hoyito y empezar a lamerlo.
        Después d un rato lamiéndome el ano y dejarlo lleno de sus babas, llevó un dedo, empezando a meterlo dentro de mi culito, ¡ohhh! ¡ohhh! Volví a suspirar al notar entrar su dedo. Si seguía así, el curita me iba hacer correr antes de meterme su polla en el culo.
       Pero no fue así, y enseguida me ordenó levantarme, y después de volverle dar una buena chupada a su polla, el curita se sentó en la banqueta, ordenándome que me sentara a horcajadas sobre él.
       Ven, me dijo agarrándome por los brazos, abre las piernas, y siéntate a horcajadas sobre la polla.
    
        Abrí las piernas, y arrimándome a él coloqué las manos sobre sus hombros, y mientras el me iba abriendo el culo con sus manos, yo me iba sentando sobre su regazo. Poco a poco fue entrando en mi culo aquella gran polla que se mostraba erguida, tiesa y bien dura del curita, hasta que estuvo toda dentro de mí culo.
       ¡Ufff! Suspiré cuando estuve sentado sobre su regazo y con la polla del curita toda dentro de mí.
       Notaba los huevos del curita pegados a la entrada de mi culo, y la cabeza de su polla cómo rozaba ...
    ... mi próstata, llegando al tope de mi ano, mientras el agua seguía saliendo por el grifo inferior y hacía que nos fuésemos mojando los pies.
       Cuando quedé sentado sobre el regazo del cura y ensartado por su foronga, el curita jadeando decía mi nombre y me iba hablando, ¡ohhh! ¡ohhh! Dani, así mi niño, así, deja que esta pobre y humilde polla entre en este culito tan rico y perverso que tienes. Quédate así y no te muevas mientras se va acomodando tu culito, Dani. 
       Mientras yo quedaba quieto sobre el regazo del curita, estando bien ensartado por aquella pija que mi culo había tragado, el curita iba mordiéndome los pezones que estaban duros y tiesos, haciendo que gimiera y me abrazara más fuertemente a su cuello. 
       ¡Ohhh! ¡ohhh! ¡ooohhh! Gemía yo mientras el cura mordisqueaba mis pezones y me tenía ensartado en su polla.
    
        Así, así, gime mariconcito, ya verás cómo este curita te quita la pena que siente este culito perverso que tienes. 
        Empezó el cura a hacer que fuera levantando mi culo, y le fuese cabalgando la polla que me tenía ensartada. Así maricón, así, mueve el culito y haz que este pobre cura te ayude a redimir tus penas y pecados, ¡ohhh! ¡ohhh! Maricón que bien te mueves, ¡ohhh! ¡ohhh! Cómo me gusta, ¡ay que gusto Dani! Ay que gustazo me estás dando pedazo de maricón.
        Yo subía y bajaba cabalgando sobre la polla del curita, mientras él me iba diciendo toda clase de barbaridades, sintiendo cómo su polla rozaba mí próstata, y sus dedos pellizcaban y ...
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