1. Adriana, mi segunda y última infidelidad


    Fecha: 16/09/2020, Categorías: Fantasías Eróticas Autor: Tonyzena67, Fuente: CuentoRelatos

    ... ¿Por qué los hombres siempre piden lo mismo? ¿Qué no saben que eso es de salida y no de entrada? – lo decía con ese acento argentino. -Mi primer novio, el segundo… y este último…
    
    - ¿Se lo has dado?
    
    - No.
    
    - ¡Este día eres una chica mala, puede ser la excepción!
    
    - ¡Sabes! Tienes toda la razón… este día es especial, es un día para el olvido… y no me mal entiendas… hoy he perdido la razón, he perdido los estribos… cógeme como tú quieras, este el día donde todo es permitido.
    
    Le comí el culo por más de media hora. Todos mis dedos de mi mano derecha abrieron su culo. Algunas veces le inserté mi verga en su conchita, mientas mi pulgar abría su esfínter y Adriana solo gemía. Cuando mi verga ocupó todo ese espacio, Adriana solo gimió y chocaba su trasero con violencia contra mi verga. Se la taladré por más de 10 minutos constantemente, y comenzó a gemir, a jadear y en seguida como una sorpresa dice: ¡Tony, clávame, no pares… me estás haciendo acabar!
    
    Esos eran gritos desesperados, que pensé me enviarían los guardias de seguridad del hotel. Se fue en contra de la cama y con aquellos gemidos y alaridos me fui en los intestinos de esta argentina, quien fue la segunda y última mujer con quien traicioné a mi mujer. El culo de Adriana sangró, pero le alivié diciéndole que era algo normal. Había visto ya otros culos sangrar, incluso el de mi esposa, pero este día lo tengo presente, porque cargué con esta culpa por todos y muchos de estos años. En el avión, nos sentaron en asientos separados y nunca nos dijimos adiós, ni nada.
    
    La chica argentina desapareció llegando a Los Ángeles, donde me esperaba Nadia, mi linda y bella esposa con mis dos lindos hijos. Eran las once de la mañana de un día viernes, y Nadia como mi mujer y cinco días de no sentir mi compañía… tan pronto atravesamos esa puerta de la habitación… me da un oral y de perrito ella acaba… yo me doy dos minutos más para acabar en ella y solo me dice:
    
    - ¡Te extrañé mi amor!
    
    [email protected]
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