1. Leyendas Indigenas; los niños arcoiris


    Fecha: 27/03/2020, Categorías: Intercambios Autor: shotaboy, Fuente: SexoSinTabues

    ... ella. -Eso mi niña, ya casi termina! -dije seguro de que este polvo duraría al menos media hora. La pequeña lloraba mientras yo enterraba sin prisa pero sin pausa mi pene dentro de ella, luego de costosos cinco minutos ya estaba toda adentro, pasó otro par de minutos hasta que se acostumbró e inicié mi penetración formal, le gemelita había dejado de llorar y sus constantes quejidos se dejaban escuchar cada vez que mis bolas chocaban contra sus nalguitas, asi estuve bombeandola sin descanso y con buen empuje como veinte minutos, ahora lo único que la niña emitía era gemidos. -Sabía que te iba a gustar! -exclamé. Me sentí a punto de correrme y con toda la satisfacción del mundo le llené la vagina de mas que suficientes mecos como para embarazarla a ella y a tres generaciones más, la leche escurrió de su conchita y su hermano al ver el precioso liquido salir de la vagina de su hermana gemela se apresuró a sorberlos, y una vez que hubo terminado procedieron ambos a lamerme la verga, pero que va, no recordaba la ultima vez que había echado tres polvos seguidos, creo que fué con Cesar despues de inhalar ciertas hierbecillas, uf esa noche le reventé el culito casi siete veces seguidas. -EL cigarro! -dije exaltado. Rápidamente encendí el cigarrillo especial y unos minutos despues cuando sus efectos se hicieron visibles le di a los gemelitos una buena porción de chocolate en sus bocas y colocando a la pequeña en cuatro patas instruí a su hermano para que la penetrara por el ano, el ...
    ... niño se desempeño como todo un semental, su hermana gemía sin parar, entonces yo con mis pilas bien recargadas lo sodomicé nuevamente, esta vez sin gritos ni quejas, solo gemidos, tenía a ese par de hermanitos para mi solo, incluso pensé en llevarmelos a casa, coseguirles documentos falsos y criarlos como mis hijos "mascotas" o algo así. La mañana le cedía paso al mediodía y este a la tarde, yo y mi verga no aguantabamos más, había roto a esos hermanitos por todos y cada uno de sus agujeros, bocas, culos, vagina, etc. Había logrado enterrar mi verga con tanta libertad y fuerza como siempre quise, los hice sangrar, los hice llorar, - Ah! la vida no tiene nada mejor que esto. Luego de seis polvos mas nos habiamos dormido a orillas de la laguna, al despertar el sol casi se ocultaba, busqué a los pequeños con mis ojos pero no los vi, no había arcoiris ni gemelitos ni nada, no lo comprendí. Fuí hallado doce horas despues a cinco kilometros de aquella laguna mágica, un par de indigenas guiaron un equipo de busqueda y uno de ellos fué quien me encontró, al hablar con él le comenté lo del arcoiris y los niños que jugaban en la laguna, a lo que él me respondió diciendo: -Ellos son Arco y Arca, hermanos del arcoiris -exclamó y prosiguiendo dijo- son dioses de temer, pueden matarte tortuosamente, pero si ofreces regalos y divertimentos ellos perdonarte. Bah! todo eso sonaba muy comiquitas, tal vez incluso lo imaginé todo, es decir, una semana sin pajearme, perdido en la selva, sin casi ...