1. Noches y Noches


    Fecha: 13/02/2020, Categorías: Sexo en Grupo Autor: Bruno, Fuente: CuentoRelatos

    ... enterar.
    
    —¿Sí? Fóllame, chaval. Demuéstrale a mi culo lo que tu polla puede hacer.
    
    -A sus órdenes, señor.
    
    Saulo preparó digitalmente el ano de Axuán para la follada que habría de aguantar. Axuán gemía de placer y suspiraba cuando los dedos de Saulo rozaban su próstata. Saulo miraba embelesado el rostro de Axuán y lleno de amor embistió de lleno en su agujero. La penetración prosiguió, Saulo se inclinó y besaba a Axuán mientras se la metía. Las lenguas de nuevo salieron y se cruzaban en el aire como pequeños látigos carnosos hasta que las bocas las sellaron. Saulo acariciaba el cipote de Axuán en cada embestida con sus manos, mientras que Axuán azotaba a Saulo. Estos golpes y caricias enardecieron a ambos, pero la edad algo tenía que valer y fue Saulo el que se derramó.
    
    —Quería sentir tu leche… condensada —se quejó débilmente Axuán.
    
    —Lo siento… fóllame… fóllame… fóllame hasta que estalle de tu puta leche.
    
    Aquellas palabras cachondearon a Axuán, que levantó al agotado Saulo hacia el sofá y levantó sus blancos tobillos hasta los morenos hombros del maduro. Se la metió de una sola estocada y Saulo chilló del placer de sentirse sometido a tal hercúleo miembro. Aquellos gritos cachondearon aún más a Axuán que inició un ritmo demoledor. Saulo aproximó sus labios a los de Axuán y sintió como todo él era invadido por aquella enorme verga caliente.
    
    —Cómo te quiero —alcanzó a decir Axuán.
    
    —Quiero todo. Recuerda, mi gran cabroncete-amor. Recuerda que te quiero ...
    ... todo. Recuerda que te quiero todo tú. Dámelo todo.
    
    —Me llenas Saulo.
    
    —Lléname de tu leche. Quiero sentir tu lefa incluso saliendo más allá de mis orejas.
    
    Axuán continuó moviéndose más y más deprisa… finalmente Saulo sacó la gigantesca polla, liberándola del condón y la chupó mientras exprimía los gordos huevos de Axuán. Axuán se dejó llevar y en un empellón se corrió en la boca de Saulo, que bebió todos sus jugos.
    
    —Esto sí que es leche condensada. Qué bien sabes, amor.
    
    —Ya me hubiera gustado a mí probarte, cabrón. La próxima vez quítate el condón. Yo estoy sano.
    
    —Así que habrá próxima vez… te adoro, mi cabrón. La tienes más larga y cachonda que un chivo.
    
    —Por supuesto. Hacía tiempo que nadie me follaba así. La próxima vez, sin condón…
    
    —No, mi amor —el rostro de Saulo se ensombreció— Todos tenemos nuestros secretos. Te voy a poner una canción. Es muy triste, pero todo lo placentero y bueno, como lo que hemos hecho ahora, tiene su lado sombrío. A veces sólo sale por la noche. Noches y noches he estado esperando alguien como tú. No sé ni cómo ni por qué te elegí. Prefiero no saberlo. Ése es tu vacío: querer saber todo. Como Fausto.
    
    Encendió la minicadena y sonó el disco que había puesto:"Noche tras noche recuerdo tus caricias, tu dulce voz/ mi recuerdo crece muy adentro y revive mi dolor…".
    
    Así comenzó el año más dulce de mi vida. Con esas escapadas a la Peña de Francia donde hacíamos el amor. El Madrid de los Austrias que tanto te entusiasmaba. Tu ...