1. Probo el sexo con su tia


    Fecha: 09/12/2019, Categorías: Incesto Autor: Anónimo, Fuente: RelatosEróticos

    ... que le provocaba placeres diferentes. La humedad de la boca, ya lo terminaba de volver loco. Además aquella sonrisa constante de su tia con la polla en la boca, le provocaba una oleada de sentimientos. Quería ponerse encima, y meterle la polla, experimentar por fin con aquello del sexo.
    
    Pero para su desgracia, aquella experiencia sería muy corta. No fue consciente de que se estaba corriendo hasta que vio salir el semen de la boca de su tía. Se estaba corriendo dentro de la boca de su tia. Pero el pensamiento vino demasiado lento. Vio como su tía se apartaba sorprendida, y en ese instante un chorro de semen salió disparado con fuerza y le surcó la cara, un segundo chorro se estrelló contra su boca cuando se acercaba de nuevo a meterse aquella polla loca en la boca. Entonces fue cuando llego el fuerte orgasmo. Uno que le recorrió el cuerpo y lo dejó desconectado por unos segundos. Sintió como el semen salía con fuerza con cada espasmo que recorría su cuerpo. Pudo abrir los ojos brevemente, incapaz de ...
    ... controlar su propio cuerpo, y se le gravó en la mente la imagen de su tía sonriendo con un chorro de semen que casi le entraba en el ojo, chupando la polla llena de fluidos mientras dejaba que el semen fuera saliendo desde dentro de su boca según salia.
    
    - Que cantidad de semen mas descomunal. Me pilló por sorpresa. - Su tía no dejaba de masturbarlo, jugando con la polla húmeda.- Ves, es a esto a lo que me refería, si no hubiera querido que te corrieras dentro, no habría llegado tan lejos. Aunque me has durado un suspiro.
    
    Su tia se limpiaba el semen de la cara con la mano, y mientras, no dejaba de sonreír. Con la otra mano continuaba masturbandole, como si esperara que terminara de eyacular, si es que aun tenia que hacerlo.
    
    - Es que no se te cae nunca? continua dura como al principio.
    
    Se quitó el jersey y luego desabrochó su sujetador. Hizo que separara las piernas y se colocó tumbada entre ellas con la polla en la cara. Se la metió en la boca de nuevo.
    
    - Veamos cuantas veces eres capaz de correrte. 
«1234»