1. Mi mujer y el negro: la pareja perfecta.


    Fecha: 27/11/2019, Categorías: Sexo Interracial Autor: Anónimo, Fuente: RelatosEróticos

    ... se levantó (coqueta y atrevida como siempre había acudido a la cena con su típico picardía, esta vez blanco, y sus tacones) y se acercó a la barandilla para disfrutar del paisaje y de la puesta de sol. Desde allí se veía el valle que comenzaba a entrar en penumbra y el horizonte estaba rojo, como de fuego, con la luz del sol que ya se ocultaba. La silueta de mi mujer se recortaba sobre ese fondo en una escena que era única y por ello comencé otra vez a tomar fotografías.
    
    - Precioso.. ¿verdad, Manuel?
    
    - Es una imagen bellísima…cierto.
    
    Los dos observábamos tanto el cielo enrojecido como la bella estampa femenina, que con el trasfondo del crepúsculo y la suavísima tela del picardía, se la podía ver como desnuda. De espaldas a nosotros, la mujer absorta en el paisaje, exhibía su cuerpo, una cintura bien definida, buenas caderas y bellos muslos ligeramente abiertos. Una ligera brisa, propia del atardecer, refrescaba el ambiente y con su impulso levantó un poco la tela del picardía, mostrando aún más la anatomía de mi mujer.
    
    - Creo, Rodrigo, que tu mujer no lleva bragas.
    
    - Eso mismo estaba pensando, creo que va liberada totalmente.
    
    - Sí. Está guapísima.
    
    - Me gusta que mi mujer me ponga los cuernos contigo, Manuel. Eres ya el mejor amigo de los dos.
    
    - Yo te lo agradezco, han sido los días más felices de mi vida. Tu mujer es para mí muy especial, ya lo sabes.
    
    - Lo sé, lo sé. Pero es muy puta…jajajajajaa.
    
    - Sí, si, que lo es… Jajajajajaja. Pero me ...
    ... encanta y a ti también.
    
    Ella se volvió un poco hacia nosotros al escuchar que nos reíamos.
    
    - ¿Qué estáis tramando?. ¿Seguro que es algo sobre mí, verdad?
    
    - No lo dudes, querida, tú lo mereces. No te muevas, que estás ahí bellísima.
    
    - Gracias, sois muy amables, mis dos hombres, mis tesoros…jajajaja
    
    - Estás tan estupenda, que creo que puede suceder algo ahora..
    
    - Que suceda lo que tenga que suceder, yo estoy siempre receptiva…jajaja
    
    Hice una señal a Manuel, para que fuera a por ella.
    
    - Te está esperando, negrito, no seas tonto, aprovecha…
    
    Sin esperar más se desnudó Manuel quitándose la poca ropa que llevaba. Con el miembro apuntando para arriba, enhiesto, duro como una tabla como se le ponía siempre, se acercó a ella y la enlazó por la cintura, apoyado también la barandilla y observando el horizonte. Luego la mano bajo hasta su trasero y allí se quedó, acariciando y apretando. Ella sacó un poco el culo hacia atrás, para facilitarle la labor. Transcurrido un rato, Manuel se puso tras ella, la hizo doblar un poco hacia adelante para que quedara más expuesto el culo, y la penetró en esa posición, bombeando despacio. La figura de los dos amantes, desnudos, los cuerpos perfectos, contrastando la blancura de la piel de Lucía con la más oscura de él, se recortaba sobre el fondo rojo.
    
    - Poneros ahora de lado, por favor.
    
    Obedientes como siempre, se giraron para presentar una nueva estampa a la cámara. Manuel ya había despojado a mi mujer del pequeño camisón y ...