1. Ayudando a Mamá (04).


    Fecha: 20/01/2019, Categorías: Incesto Autor: nokomi, Fuente: RelatosEróticos

    Capítulo 4
    
    Por culpa de mis estúpidos celos había arruinado una vez más mi relación con mamá. Ella pasó dos días casi sin dirigirme la palabra. Aún estaba dolida y enojada por mi reclamo. Al fin y al cabo ella tenía derecho de acostarse con quien quisiera sin que ni yo ni nadie le reprocháramos nada. Sabía que debía darle tiempo y espacio y que cuando ella lo creyera oportuno, me hablaría.
    
    Fue una suerte el no tener que esperar mucho para que esto ocurra. Al tercer día ella se me acercó. Estaba vestida con una linda pollera de jean azul y una remera negra que marcaba muy bien sus pechos. Me interceptó cuando yo cruzaba desde la cocina al comedor. Ni siquiera me pidió que me sentara.
    
    - Tengo que hablar con vos y no te va a gustar lo que te voy a decir – sus palabras me dejaron helado.
    
    - Te escucho – tragué saliva.
    
    - Como quiero que sigamos viviendo juntos… y bien, te voy a pedir que terminemos con toda esta locura. No quiero que nos peleemos a cada rato, por eso tenemos que cortar el problema de raíz. Tenemos que volver a nuestra relación normal como madre e hijo.
    
    - ¿Qué tan normal? – pregunté con el corazón hecho añicos.
    
    - Normal como lo fue hasta el divorcio con tu padre. Nada de andar con poca ropa por la casa, nada de toqueteos y dentro de lo posible, no hablamos más de sexo. Vos ya sos grande y creo que ya no tengo más nada para enseñarte al respecto – estuve a punto de decir algo pero ella levantó una mano indicando que aún no había terminado de ...
    ... hablar – lo que pasó tomalo como una linda experiencia, sé que nunca te la vas a olvidar… yo tampoco. Pero ya se terminó Nicolás. Mi mayor miedo es que la gente se entere… eso arruinaría nuestras vidas.
    
    - Está bien mamá – me quedé cabizbajo pensando unos instantes - ¿Podemos hacerlo por última vez?
    
    - No, no sería apropiado. Como te dije, hay que cortar el problema de raíz y hay que hacerlo lo antes posible.
    
    - ¿Y un último beso al menos? – ella me quedó mirando a los ojos mordiéndose el labio inferior – por favor – le supliqué – sólo un beso. Ni dos ni tres, uno.
    
    - Está bien – accedió.
    
    Al principio fue un poco incómodo, nunca había besado a mi madre en frío y mucho menos anunciándolo antes. Hubo un par de intentos por parte de ambos pero sin llegar a concretar el beso. Era bastante difícil aliviar la tensión, pero nuestras caras se iban acercando de a poco. Por fin tomé coraje y me lancé. Su boca se humedeció con nuestra saliva. Me abrazó con fuerza y yo la sujeté por la cabeza. El beso fue ganando pasión gradualmente. Podía sentir su cuerpo pegado al mío y su respiración agitándose. No quería soltarla, sabía que ese sería nuestro último beso. La fui llevando hacia atrás hasta que se apoyó contra la mesa del comedor. Sus manos acariciaban mi espalda, ella también sabía que en cuanto nuestras bocas se separaran, todo terminaría para siempre.
    
    Acaricié una de sus piernas sin dejar de besarla, fui subiendo un poco su pollera pensando que me detendría pero no lo hizo. ...
«1234...9»