1. Nora y Martín, una relación incestuosa


    Fecha: 08/08/2017, Categorías: Sexo con Maduras Autor: dudek, Fuente: CuentoRelatos

    ... consternada, fue darme cuenta de que los personajes dibujados eran una reproducción con lujo de detalles de él y de mi misma. Si, así es… era una historieta porno cuyo argumento era elincesto entre una madre y su hijo… y esos dos personajes, eran nada más y nada menos que él y yo. Mis ojos no podían creer lo que estaban viendo, pero podría describirles con lujo de detalles como yo me veía dibujada en muchísimas posiciones sexuales junto a un muchacho que la mismísima historieta decía que era "mi hijo"… y no exagero, hasta teníamos los mismos nombres que la vida real.
    
    Me sentí humillada, triste, y muchos otros sentimientos que me llevaría tiempo enumerar… no sabía qué hacer, guarde silencio un tiempo, pero una vez que el llego a casa me decidí planteárselo y a preguntarle a mi hijo porque había dibujado todo eso, que quería que quemara todos esos dibujos y que tenía que ir a ver a un psicólogo. El entre lágrimas me pidió disculpas, asegurando que fue algo que le pidieron dibujar a cambio de dinero, fue una situación muy incómoda y algo que me costó bastante tiempo perdonar… y aunque con el tiempo lo hice y la relación volvió a la normalidad, en mi cabeza no podía olvidar lo que había visto… y si en realidad era todo mentira y esos dibujos eran producto de sus más íntimas y profundas fantasías sexuales? y si en realidad a mi propio hijo le excitaba su madre...??
    
    Lo cierto es que, necesitaba comprobarlo… y solo había una manera… tenía que ponerlo a prueba. Pasaron como 2 ...
    ... semanas luego del incidente, cuando me decidí a llevar a cabo un plan para verificar si efectivamente mis sospechas eran ciertas. Transcurrió toda una semana donde me dediqué durante varios días a hacer quehaceres domésticos, pero con una clara intención: hacer periódicas "insinuaciones" de carácter provocativo a ojos de mi hijo… para ver cuál era su reacción.
    
    La primera prueba fue ir a su cuarto una tarde que él jugaba a su PlayStation con la excusa de que tenía que guardar una ropa en su placard, él estaba en la suya, y yo… en un instante, decidí simular que se me caían un par de prendas del estante en el suelo, y al hacerlo, incliné mi cuerpo agachándome hacia adelante durante algunos segundos, procurando estar de espaldas a mi hijo para dejarle una vista privilegiada de mi culo. Llevaba puesta una pollera hasta las rodillas que se me levantaba sutilmente cuando me empinaba… y fue en ese momento, cuando al mirar de reojo, pude darme cuenta de que Martin me estaba mirando el trasero. Un calor intenso recorrió todo mi interior, y es el día de hoy que esta es una de mis más acaloradas anécdotas, la que más le gusta oír a él.
    
    Así fue como me di cuenta en una primera instancia de que ser su madre no era un impedimento para que me mire de la forma en la que cualquier hombre mira un trasero.
    
    Al día siguiente, él estaba en el comedor desayunando y viendo algo con el teléfono celular, yo me puse a pasar la aspiradora, y en un momento me puse delante suyo y me agaché otra ...
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