Buscando un Amigo - Relatos Eróticos

Buscando un Amigo

... a experimentar otra vez en mucho tiempo. Quiero conservar este recuerdo como lo que fue. Algo hermoso. Le di un beso en la mejilla y bajamos. En el ascensor le dije, salimos con total discreción y nos despedimos en la puerta cada uno para un lado. Si alguna vez nos volvemos a encontrar manéjate con tranquilidad y nos saludamos como quienes dos que se conocen y nada más. Me fui por la izquierda, durante varias cuadras pensaba, supongo que sonriente y me decía. Javi, salió todo perfecto. Te has tomado toda la leche. Durante varias calles mientras caminaba recordaba su pene explotando y derramándose en mi boca y me invadía una sensación enorme de placer. Se perpetuaba el sabor de todo aquel semen en mi boca. Recorría mi lengua por dentro con la sensación de un logro muy deseado. Durante días me asaltaba las imágenes de toda la tarde, pero lo que persistía fue sentir los temblores en mi boca mientras eyaculaba y yo sin pensar me trataba de tragar hasta la última gota. Fue un premio mucho mayor que disfrutar antes de todo si liquido pre seminal que por cierto es mucho más agradable y sabe viscoso y saladito, bien definido. No nos hemos vuelto a cruzar, han pasado 4 años. Y creo que es mejor. Me habría enviciado con aquel chico. Me hubiera gustado mamarle todos los días. Talvez más de una vez. O me hubiera enamorado. Lo cierto es que no he vuelto a hacer otra mamada. Me las dejo hacer y cuando sucede comprendo y valoro lo que hace mi chica. Ella nunca sabrá cómo y por qué la entiendo. Vuelvo a insistir en que hacer una rica mamada es un acto de generosidad muy grande. Javi 2018