Speedo - Relatos Eróticos

Speedo

... decir, lo que contrastaba con su cuerpo donde no tenía un solo vello y donde su miembro estaba a escasos milímetros de asomarse. Además es bien sabido que en natación abundan los gays, o según eso decían mis amigos. Noté que cuando terminaba la clase, él no se desnudaba enfrente de los demás chicos como todos, sino que se metía a una regadera y no salía hasta que todos se iban. Me pareció extraño pero no le di importancia. La clase siguiente, el entrenador me pidió que me afeitara los vellos del cuerpo por higiene o algo así. Yo no tenía ni idea de cómo hacerlo pues nunca me había afeitado nada que no fuera la cara, así que le pedí ayuda a Tom, él me dijo que era muy fácil y que me ayudaría. Cuando terminó la clase fuimos a una farmacia y Tom me dio una caja rosa donde venían una crema y un rastrillo sin filo. -Mira, este es mejor porque no corta los vellos y no crecen más gruesos. Es el que yo uso-me dijo camino a mi casa. -Vaya, y yo que iba a usar una navaja de afeitar cualquiera. -No, te puedes cortar y tus piernas no se verían así de bien. Eso me sacó de onda. Me afeitaba las piernas por higiene, no por estética, pero no le dije nada. Compré la caja y nos fuimos. Llegamos a mi casa y cuando abrí la puerta él se me quedó mirando. -Ehm… creo que aquí te dejo. Tengo que ir a casa. -¿Por? Ven, pasa. No sé usar esto y cuando terminemos podemos jugar playstation o un partido rápido de futbol en el jardín. Tom entró pero parecía más un gato que una persona. Caminaba lento y ...

... con cuidado, como con miedo o preocupado. Llegamos al baño y me cambié, dejándome sólo en el speedo. Tom se quedó en el borde la puerta del baño. -Ven-le dije- los dos somos hombres ¡Por Dios! -Sí, sí, ya. Debes ponerte primero la crema y esperar unos minutos. Así lo hice. La crema olía bastante mal así que tuve que abrir una ventana para que saliera el olor. Después de 5 minutos pasé el rastrillo y, como por arte de magia, ya no había vellos. Cuando terminé las piernas fui al pecho y al abdomen. Cuando me vi en el espejo me gustó como me veía. Me veía limpio y más joven. No sé como describirlo. Me veía femenino mucho más atlético. -Oye, esta crema es increíble. Creo que fue una excelente opción. -Sí, esa es la que uso yo y ahora mis vellos son súper delgados y no tengo que afeitarlos todo el tiempo. -Sí, es una joda. ¿También tengo que afeitarme la herramienta?-dije bajando mi speedo y viendo mi miembro. Cuando levante la mirada los ojos de Tom brillaban y me miraban como un león a un bisteck. -Oye, oye, acá. -No, no te tienes que rasurar la herramienta, no si no quieres. -Pues no sé, me gustaría terminar con todo de una vez, pero… Mi celular comenzó a sonar. Era mi novia, le expliqué que estaba con un amigo y que iba a estar ocupado todo el día, le dije te amo y le colgué. Cuando me giré, Tom estaba más cerca sentado en la orilla de la bañaera donde ahce unos momentos estaba yo. -¿Te sobró algo de crema?-me preguntó-, creo que me afeitaré también. -Claro, úsala. Se quitó la ...