1. Alexa, una chica seria que resultó ser una pervertida (3)


    Fecha: 06/12/2022, Categorías: Hetero Autor: afuentes, Fuente: CuentoRelatos

    ... piernas.
    
    Entramos a la habitación dejamos la ropa en el piso y nos tendimos en la cama, nuestros cuerpos se habían secado un poco y nos abrazamos, reímos con complicidad y Alexa comentó.
    
    - Somos unos pinches calientes.
    
    - Me gustas mucho.
    
    Alexa retomó el juego y su personaje.
    
    - Que bueno que mi amiga me canceló.
    
    - Sin duda esto es mejor que tomar café.
    
    - Vaya que sí.
    
    - Por cierto… ¿cómo te llamas?
    
    - ¿Hace alguna diferencia?
    
    - No, ninguna.
    
    - Entonces solo cógeme y ya.
    
    - Ven, vamos a la ducha.
    
    Tomé a Alexa de la mano y fuimos juntos hasta la regadera para sacarnos el sudor. De regreso a la habitación nos secamos el cuerpo mutuamente y nos volvimos a tender sobre la cama, y pedí a Alexa se acomodara boca abajo.
    
    Besé su nuca, sus hombros y su espalda, recorrí su columna vertebral con mi lengua un par de ocasiones, aunque en la segunda bajé más y metí mi lengua entre sus nalgas. Ella suspiró y abrió un poco las piernas y levantó un poco el trasero, yo tomé una almohada y la metí por debajo para ayudarle, besé sus nalgas, las acaricié con mis manos y las apreté un poco, volví a meter mi cara entre sus nalgas y comencé a lamerle el ano. Su primera reacción fue de sorpresa y apretó un poco pero a los pocos segundos aflojó su cuerpo y se dispuso a dejarse hacer lo que yo quisiera.
    
    Continué lamiendo y lejos de desagradarme me gustaba que su ano tenía un sabor dulzón, eso me invitaba a seguir comiéndomela, después de un rato comencé metiendo ...
    ... un dedo, luego dos, luego tres… en un momento pensé en meterle el puño en modo de fisting, pero decidí reservar eso para otro día, así que aprovechando una nueva y firme erección me subí sobre las nalgas de Alexa y lentamente la penetré analmente.
    
    Sentí que Alexa contuvo el aire, y acomodó bien su cuerpo sobre la almohada, poco a poco elevé el ritmo y profundidad de la penetración
    
    - Si bebé… cógeme por la cola… (Decía Alexa con una voz entrecortada)
    
    - Qué rica colita tienes mamita.
    
    - Es tuya, métemela toda.
    
    - ¿Te gusta cómo te estoy cogiendo?
    
    - Dámela… dámela toda.
    
    Los gemidos de Alexa inundaron la habitación, por fin podía gemir, gritar y maldecir como lo deseaba. Salí de ella y la acomodé a la orilla de la cama de lado casi en posición fetal, su vagina y su ano quedaron completamente expuestos a mi disposición así que le metí la verga en su vagina y di algunos bombeos, cuando sus gemidos me indicaron su nivel de excitación cambié a penetrarle el culo, eso la prendió más, y con la verga lubricada por sus propios líquidos vaginales el movimiento era más fluido, cuando sentía que disminuía la lubricación regresaba a cogerla por la vagina y repetimos así por un buen rato.
    
    Sentí que no iba a tardar en venirme, así que la acomodé de perrito a la orilla de la cama y la penetré analmente, deseaba llenarle de leche el culo, así que la tomé por los hombros para empujar más fuerte y la embestí hasta que no pude más y me vine. Alexa cansada iba a recostarse en la ...