1. Sofía Marian, la güera misteriosa de Toluca (Parte 2)


    Fecha: 27/09/2022, Categorías: No Consentido Autor: Alien_system, Fuente: CuentoRelatos

    ... melosa y de reclamo me decía, “te odio… siempre te sales con la tuya” mientras mi cadera bombeaba en las entrañas de su panochita, y ella solo cambiaba la mirada y sabía que lo estaba disfrutando al máximo, sus besos eran frenéticos, se volvían bruscos y trataba de meter toda su lengua en mi boca indicando que estaba llegando al clímax, como había comentado.
    
    Su humedad la delataba, solo se limitaba a quejarse de que no la pelaba, pero yo no quería escuchar reclamos, los dos deseábamos esa sesión de sexo (recientemente ella me confeso que lo que más le agradaba de estar conmigo era el quedarse conmigo toda la noche. Esta confesión suya fue en una plática que tuvimos recientemente recordando un poco nuestros encuentros), como les comente ya antes había preparado la grabadora y el teléfono listo para inmortalizar fotográficamente ese encuentro, esa tarde parecía corresponsal de canal de investigación paranormal, iba a descubrir los enigmas de mi Güera Misteriosa, así que como siempre me esforcé para que esa tarde estuviera ella bien caliente para poder captar las palabras que me intrigaban.
    
    Ya la tenía con la ropa suelta antes de llegar a la habitación, tiernamente la lleve hasta la recámara y nos quitábamos el resto de nuestras ropas, nos metimos ambos entre las sábanas y siempre atento a que la almohada que había preparado con la grabadora estuviera libre sin mucho movimiento para evitar el bloqueo del micrófono, asegurando que siempre estuviera cerca de su cabeza, ya ...
    ... dentro de la cama me dedique a besarle su cuerpo, bueno medio cuerpo ya que ella no permitía que bajara más allá de su pelvis, la acariciaba y con la seguridad de que ella no tenía sexo con otra persona y yo solo tenía con mi novia y con Sofía, por lo que no había necesidad de usar condón ya que ella era consciente de que le daba verga solo a ellas dos, la sensación para ella y para mi era más que placentera sin la barrera del látex. Mis manos recorría su cuerpo desnudo mientras ella solo cuidaba que no me sobrepasará de su zona permitida por sus tabúes, los juegos previos sobre ella la hacían sonreír al sentir mis caricias y su rostro se paralizaba un instante cuando sentía que ya la tenía en posición de misionero (era la que casi siempre ella permitía iniciar que me la cogiera) colocándome entre sus piernas y mi verga ya invadía su panocita, con mi cuerpo sobre el suyo, su panocha que tenía pocos vellos pero ya estaba inundada de sus jugos de hembra necesitada de leche, y poco a poco la penetraba con sus leves gemidos que los acallaba al besarme, reprimiendo que de su boca saliera gesticulación alguna, solo su mirada y sus sonrisa eran los indicadores de que estaba disfrutando de mi falo en su interior.
    
    Yo seguía a mi ritmo acariciándola y besándola mientras mis estocadas eran más rápidas y profundas, provocando que sus pujidos fueran más intensos, y su lengua pareciera que quería violar mi boca, como si quisiera competir contra mi verga que la estaba taladrando en ese ...
«1...345...»