Nuestro huesped arribó
Fecha: 20/09/2022,
Categorías:
Sexo Interracial
Autor: Anónimo, Fuente: RelatosEróticos
... nuestra casita, no falto el Dino, que salió a saludarnos, lo tuve que hacer a un lado, parece que entendió. Yak nos dijo que en su casa también tiene un perro, que es muy raro en Aruba tener mascotas.
Horacio se ocupó en prender la calefacción, y hacer a un lado las ramas y vegetales acumulados en la puerta y jardín. Después Gloria y yo nos ocupamos en que el interior estuviera acogedor, pero lo más urgente fue preparar la cama para Yak, en el cuarto para visitas. Horacio se encargó de enseñarle a Yak el terreno y su huerto de árboles frutales. Entraron ambos congelándose del frio que reinaba afuera. Le tomé las manos a Yak y se las froté. Gloria hizo lo mismo con Horacio.
Ya entramos un poco en calor.
β¿Saben cómo se pueden calentar las manos más rápido?β preguntó Gloria.
β¡Vean, poniéndose las manos, o en la barriga, o entre las piernas! Dejarlas ahí y se les van calentando.β
Fui con Yak, le levanté el sweater y la camisa que llevaba y le planté mis manos en su barriga. β¡Ay, están muy frías!β reclamó, Gloria hacía lo mismo con Horacio, pero ella avanzó más, le desató el cinturón, le bajó la cremallera y le metió sus manos deteniéndole la bolsa de sus huevos.
β¡Ay, están muy Frías tus manos, pero déjamelas ahí, te las voy a calentar!β le dijo Horacio. Se dirigió a Gloria y primero le levantó el pullover que traía puesto, pero mejor se decidió por meterle las manos debajo de esa faldita de jersey y del pantihose que llevaba puesto, calientita, hasta su ...
... entrepierna.
β¡Que bárbaro, las traes heladas, déjalas ahí, te las voy a apretar para que se te calienten sabroso, ¿quieres?β le preguntó Gloria.
Yak iba fijándose lo que hacían Gloria y Horacio y empezó a hacerme lo mismo, pero sus manos son enormes y las sentí mucho más frías. β¡Mételas ahí para que te las pueda calentar!β le dije y, después de abrirle el pantalón le dije
β¡Aquí está tu gallinita que te va a calentar tus huevitos!β
βLos tengo muy fríos, necesito me los calientes en ese lugarcito en donde se calientan mejor.β Le bajé los pantalones y calzoncillos, yo me deshice de mis pantis, lo recosté en el sofá grande y me le monté dejando que su hermosura se me fuera metiendo. β¡Despacito para irlo calentado poco a poco!β dije, como disculpando la lentitud de mi penetración. βYa está bien adentro, ahora tengo que confirmar que Gloria no está sufriendo porque tiene frío adentro de ella.β Dijo el tramposo de Yak.
Intercambiamos Gloria y yo, ella se le montó a Yak y se midieron la temperatura interior. El pobre de Horacio estaba solo, muriéndose de frío.
β¡Ven, mi vida, nosotros tenemos un calefactor más corto, pero más sabroso!β y me le monté. Me entró rico, como siempre, rozándome mis paredes interiores, acariciándome mi punto G, que no se en donde me queda, pero buscármelo es aún un placer. Veíamos a la pareja, Gloria con Yak encima de ella, ella con una pierna levantada, él con todo su pene dentro de ella, le bombeaba y la jalaba de la pierna o nalga que ...