1. Descubriéndome como sumisa


    Fecha: 01/09/2022, Categorías: Dominación / BDSM Autor: lolalu, Fuente: CuentoRelatos

    ... manos recorrían mi cuerpo incendiándome tocándome de una manera que me hacía desear sentirlo dentro mío, mojando mis partes más íntimas, en un momento me di cuenta que estábamos en el pasillo de hotel, y mi vista se desvió hacia la puerta, paro de besarme suavemente y miro la puerta también, tomo mi mano, paso la tarjeta y entramos.
    
    Volvió a ponerme contra la pared, y me volvió a besar, cada vez lo deseaba más, me incendiaba por dentro, sentía que nunca había sentido esas ganas, estiré el brazo para cerrar la puerta y él la paró, se separó de mí y mientras me besa dulcemente en el cuello haciendo que, mi respiración se agite más aún, me susurró…
    
    -Quieres que cierre la puerta? Debes saber que, si me dices que sí, también estas diciendo que si a todo lo que suceda aquí adentro de aquí en más…
    
    En ese momento mi vista recorrió lo poco que se veía de la habitación desde la entrada que tenía un pasillo, la puerta del baño y una mesa en la cual se veía una variedad de objetos usados para juegos sexuales, me dio curiosidad, sabía que él no era un hombre al que le gustase el sexo tradicional, sabía que le gustaba jugar duro, pero nunca me había sido claro respecto a eso.
    
    -¿Cierro la puerta? -preguntó y aunque sentía unos nervios impresionantes no quería decir que no, sabiendo que esa sería mi única y última oportunidad
    
    -Si -le dije.
    
    Cerró la puerta y me miró.
    
    -Sos una puta -me dijo, en un tono seductor y autoritario.
    
    Eso me excitó, me volvió a besar, pero esa ...
    ... vez fue más fuerte, más violento, sentí un pequeño mordisco en mis labios pero no me soltó me sigue basando más suave, más tierno, como sanando la herida, su mano subió desprendiendo mi sujetador y sacando mi blusa sus manos volvieron a subir por mi espalda hasta mi nuca, cuando me agarro del cabello y me empujó hacia el piso haciéndome poner de rodillas, se agacho levemente diciéndome:
    
    -Te voy a poner en cuatro patas y vas a caminar por el dormitorio, como la perra que sos.
    
    Comencé a caminar hacia el interior del dormitorio, ahora podía verlo bien todo, la cama con barrotes y un cubrecamas bastante grueso, de un color rojo intenso, con unos diseños en blanco, y a los pies de la cama un collar, con una correa, color blanco, parecía caro, dos sillones a los lados de la mesa, antiguos de tapizado rojo fui gateando despacito, observando ,sin entender, sin conocer, me dio un poco de miedo, no a él, a que lo que me esperaba ahí no fuese de mi agrado, solo deseaba que no usara ese collar conmigo, lo mire y luego a él que paso por mi lado caminando, aflojándose la camisa mientras me decía.
    
    -Así no putita, moviendo el culo -mientras se desabrochaba los botones de los puños de la camisa.
    
    Le seguí el juego, me gustó lo que me decía, sentía que le gustaba lo que estaba haciendo, se sirvió un trago, y se sentó en uno de los sillones, llamándome hacia él yo me acerqué, siempre en cuatro patas, me tomó del pelo y llevó mi cara hacia su entrepierna restregándomela por arriba del ...