1. Fermín y yo con Blas


    Fecha: 11/08/2022, Categorías: Gays Autor: janpaul, Fuente: CuentoRelatos

    ... preguntó:
    
    — Sois gays los dos, ¿cierto?
    
    — No —contestó Fermín—, Juan Pablo sí, pero yo no.
    
    — Ah, sois hermanos...
    
    — No; él, Fermín, es mi mejor amigo, —dije.
    
    — Ah, y tienes novia, claro, —dijo Blas de cara a Fermín.
    
    — Pues tampoco; ni yo tengo novia ni Juan Pablo tiene novio...
    
    — Qué raro..., y ¿qué haces cuando lo...?
    
    — ¿Cuando siento necesidad?
    
    Yo comencé a reírme y me miraban los dos extrañados.
    
    — Cuéntale, cuéntale cómo lo resuelves, —le dije a Fermín.
    
    — Levanta la cabeza y mira hacia atrás... —Blas obedeció y Fermín prosiguió—. Juan Pablo y yo somos amigos desde niños, pero que muy amigos. Ahora mira el culo de Juan Pablo... ¿Crees que con un culo como ese tan perfecto y bonito puedo preocuparme?
    
    — Pero tú no eres gay...
    
    — No, pero un culo es un culo y tiene un bonito agujero. No veras ninguna chica con un culo como ese y además él siempre tiene ganas. Ah, pero tú ¿qué?, ¿cómo te desahogas?
    
    — Pues ahí está el problema, yo soy de aquel pueblito que asoma al comienzo del valle, allí es muy complicado..., pero sí, llevas razón, como ese culo ninguno, ni en chica ni en chico, eso es la perfección, da gusto verlo… —dijo Blas.
    
    — Y tocarlo —decía Fermín—, ¿quieres tocarlo?, te doy permiso, tócalo.
    
    Miré a Fermín con media sonrisa y el ceño exageradamente fruncido para mostrar mi complacencia y Blas me dijo:
    
    — ¿A ti qué te parece lo que dice Fermín?
    
    — Fermín es mi mejor amigo y lo que dice me vale siempre.
    
    Blas se levantó, ...
    ... se puso de rodillas detrás de mí, me acarició las nalgas, gimiendo:
    
    — Mmm, mmm, duras, —se agachó y me dio un beso en cada nalga. Entonces Fermín le puso la mano sobre su cogote y lo llevó a meter su nariz en mi culo. Blas olió y luego comenzó a lamer, pasaba la lengua por mi agujero, me producía mucho gusto y se entusiasmó hasta meterme su lengua adentro y echarme mucha saliva. Fermín lo iba animando y ya sabía yo que iba a ser la puta de los dos.
    
    Blas me cogió de las caderas me puso en cuatro, Fermín echó saliva en mi culo y Blas escupió en su polla y comenzó a presionar:
    
    — Lento, lento, que entra solo, —le decía Fermín a Blas.
    
    Y entró. Y se aquietó. Se me puso delante Fermín y metió su polla en mi boca. Yo estaba feliz, mi sueño cumplido, uno detrás y otro delante, ¿qué más podría desear?
    
    Iban follándome y a poco tomaron el mismo ritmo, cuando uno entraba otro salía. Esto me resultaba cómodo, pero luego tomaron otro ritmo al cogerse de los bazos, salían y entraban al mismo tiempo y dentro los dos se daban un beso muy sonoro. Yo acariciaba los huevos de Fermín, tanto lo hice que obligué a Fermín a correrse y lo atrapé todo y lo iba tragando después de degustarlo. Fermín aún no entiende por qué me gusta tanto su leche. Seguí lamiendo su polla hasta dejarla limpia del todo. ¡Cómo gemía Fermín!
    
    Quedaba Blas que se corrió algo más tarde y me invadió todo mi recto de su semen. Yo ya me estaba moviendo con ganas de correrme, Fermín avisó a Blas que yo me iba a ...