1. Trio con mi marido y un africano


    Fecha: 03/06/2022, Categorías: Sexo Interracial Autor: Anónimo, Fuente: RelatosEróticos

    ... toallas hemos visto venir al vendedor de pulseras que sin necesidad de decir nada se ha acercado a nosotros y en cuclillas se ha puesto a mi lado para vender sus artículos, durante la conversación nos ha dicho su nombre (Richard) y su edad (23 años), entre las bromas de mi marido y mis risas yo no dejaba de mirar el bulto que se adivinaba debajo de su pantalón corto y el siempre sonriéndome con sus gruesos labios no apartaba la mirada de mis redondas tetas terminadas en rosados pezones. Alargué el brazo para coger una pulsera de la bandeja que ya estaba en el suelo y aproveché para rozar mis tetas con su hombro
    
    Me puse en la muñeca la pulsera blanca y marrón y levantando el brazo se lo mostré a Javier el cual sin pensarlo dos veces agarró mi mano y la depositó sobre el abultado pantalón de Richard.
    
    Aún muy sorprendida por la acción de mi marido cerré la mano de una manera instintiva , era la polla de mis fantasías pues aunque no estaba en erección era enorme, carnosa, era esa verga con la que había bromeado con mis amigas.
    
    Yo estaba desconcertada, volví la mirada a Javier y empecé a retirar mi mano cuando mi marido agarrando mi brazo por la muñeca volvió a poner mi mano sobre ese gran bulto haciendo un frotamiento lento y profundo desde la ingle hasta la rodilla de Richard.
    
    Todo estaba pasando fácil, rápidamente y en ese momento dejé de preocuparme, mi hombre me estaba animando, decidí disfrutar el momento y no pensar.
    
    Acariciando la oscura rodilla metí mi ...
    ... mano por la manga del pantalón corto hasta llegar al suave y terso glande que reaccionó con unos pequeños movimientos al contacto con mis dedos.
    
    Me gustaba rodear con mi mano una polla cada vez más dura según la frotaba y acariciaba.
    
    El ruido de unos hombres poniendo las hamacas y las sombrillas de la playa nos devolvieron a la realidad, entonces Javier sonriendo pícaramente y sin apartar su mirada de mi mano dentro del pantalón de Richard dijo “Vamos a la habitación y allí elegimos la pulsera para Isabel”.
    
    Me incorporé abrochandomeme la blusa y con un temblor de piernas seguí a mi marido por delante de Richard.
    
    Los tres entramos en nuestra habitación, Richard parecía acostumbrado, yo excitada me dejaba llevar, Javier cogió la bandeja de las pulseras, la dejó en la mesa y dirigiéndose a Richard le dijo “No quiero que la beses en la boca” y al mismo tiempo poniendo sus manos en mis hombros me hizo arrodillarme frente a Richard y con su mano izquierda acercó mi cara al bulto del africano.
    
    Con mis manos bajé los pantalones de Richard y ante mi apareció una enorme polla negra durante unos segundos la observé cerca de mi cara y agarrándola con mi mano derecha la llevé a mi boca y poco a poco la fui introduciendo en mi boca, era grande, apenas podía mover la lengua como sé que le gusta a mi marido, empecé a chuparla con los labios, con la lengua introduciendo y sacando el gran capullo negro de Richard en mi boca.
    
    La polla era tan grande que mis dos manos no eran ...