1. El capitán y yo


    Fecha: 16/05/2022, Categorías: Gays Autor: Anónimo, Fuente: RelatosEróticos

    ... armado en un amplio galpón en medio de la naturaleza. Pocos hablaban ya las energías estaban a punto de colapsar.
    
    El agua fue una bendición. La luz del día poco a poco se iba terminando. El hambre atacó por todos lados y fuimos sin chistar a la barraca donde servían las comidas.
    
    La cena fue abundante sin exagerar, era parte del entrenamiento. Algunos, luego de la cena nos fuimos a fumar un cigarro bajo las estrellas, en ese momento estábamos libres, sin ninguna obligación, ya nos habían dado descanso. Los compañeros luego de largas risas y chistes de a uno se fueron yendo, quedamos un par y yo. En eso estábamos cuando un muchachito de otro sector vino hasta nosotros pregunto quién era tal y resulto que era yo.
    
    __¡Bueno, el Capitán quiere verlo soldado en su cabaña!
    
    __¿A mí?__ pregunté cómo estúpido
    
    __¡Y si dices ser quien eres, eres tu!__ me dijo risueño el chico aquel.
    
    Me acerqué temeroso a la cabaña del Capitán, que por supuesto no compartía con nadie, me dolían los hombros y los pies, pero podía soportarlo, era joven y fuerte. Golpeé y esperé, ansioso.
    
    __¡Adelante!__ gritó la voz potente. Entre y quedé de pie, saludando al Capitán que apenas me miro en un principio, mientras acomodaba una serie de papeles.
    
    Cuando finalizo la acción levanto la vista y me miró serio y relajado.
    
    __¡Oh aquí está soldado!
    
    __¡Sí señor!
    
    __¡Está bien soldado sin tanta formalidad, esta bien!
    
    __¡Claro!
    
    __¿Está cansado?
    
    __¡Sí señor, es el primer día!
    
    __¡Y ...
    ... si, siempre cuesta!__ dijo con tono comprensivo. En aquel sitio se estaba cómodo o tal vez él hacía que aquello fuera agradable.
    
    __¡Siéntese!__ dijo el Capitán Ruiz. Me senté en un sillón no muy grande que tenía en una especie de sala de estar. Se veían dos puertas más, que supuse una sería del baño y otra de un cuarto de dormir.
    
    __¡Bien soldado, usted sabe que aquí inculcamos y pretendemos ser como una gran familia!
    
    __¡Si señor lo sé!
    
    __¡Bueno he sabido gracias a uno de sus compañeros que tiene algunos problemas soldados y aquí estamos para ayudarlo!__ dijo el Capitán muy seguro de lo que decía.
    
    __¿A qué problema se refiere señor?__ dije muy inocentemente
    
    __¡A los referidos a su…digamos sexualidad!...¡Vamos a los inconvenientes que ha tenido con ciertas chicas y que no le han permitido intimar con estas, digamos a su falta de dureza, de erección, que así es como se llama!__ mis colores subieron a mi rostro. No esperaba que el Capitán, aquel hombrón me hablara de aquella forma y del tema que se trataba.
    
    __¡No se asuste, ni se incomode soldado!¡Su Capitán lo va a ayudar!¿O no quiere mi ayuda? ¡Si es así solo dígalo y bueno, que dios lo ayude!__ dijo en tono firme y claro.
    
    __¡No, no señor, es que…no esperaba….!!
    
    __¡Sé que no lo esperaba y de eso se trata ayudar, de hacerlo sin descanso, siempre y en cualquier lugar!¿Esta dispuesto o no?
    
    __¡Sí, sí, señor…sí, claro!
    
    __¡Bien, entonces empecemos!¡__ yo estaba anonadado y aún no salía de mi sorpresa. ...