-
¡sorpresa!
Fecha: 02/05/2022, Categorías: Bisexuales Autor: Anónimo, Fuente: RelatosEróticos
... ¡me quedo encantado en Barcelona y aprovechas de ayudarme a buscar un currito! - - ¡Hay que joderse!- reclamaba Muriel - Con ustedes soy una mujer plenamente feliz. Están obligados a venir más seguido a la península. Saben que tienen su casa.- -No tienes para que decirlo – respondí sonriente – y tú estás obligada visitarnos en Chile. -Te trataremos con la misma hospitalidad que tuviste con nosotros. ¡Exactamente la misma!.- exclamé sonriente guiñándole un ojo. -Mari Pili y tú serán siempre bienvenidas- terminé por decir abrazándola - Eso no lo dudo mi hermosa y tierna Fabiola. ¡Más temprano que tarde me tendrán por allá!- exclamó Muriel besándome las mejillas. -¡Estaremos felices que nos visiten!- Agregue acercándome para volverla a abrazar. -¡Dije me tendrán no dije nos tendrán! Mari Pili ya es historia - respondió sonriendo sin ningún atisbo de congoja. - ¡Vaya!- exclamó Andrés - Espero que no seamos los responsables de la ruptura – -¡Mmmmm, No Andrés, relájate! – Exclamó Muriel - Hay una frase que dices habitualmente y que me gusta mucho, siempre hay que nivelar hacia arriba, nunca para abajo. Y lamentablemente ella no dio la talla.- - ¿La talla de quién?, ¿de Andrés? Pregunté largándome a reír abrazándola fuertemente. - Estoy muy bien así que espérenme pronto.- terminó por ...
... decir Nos abrazó a ambos al mismo tiempo para luego besar a Andrés como siempre lo hacía. Un beso en los labios y luego me besó apasionadamente en la boca. Estábamos nuevamente juntos los tres. Una vez instalados en nuestros asientos esperando el despegue no resistí la tentación de preguntar a Andrés algo que me daba vueltas en la cabeza desde aquella noche. -¿Te puedo hacer una pregunta indiscreta?- -¡No me digas que quieres saber si se puede follar en el baño! – me contestó riendo - ¡No tonto! – le contesté riendo golpeando su pierna. -¿Que te dijo Muriel al oído mientras estaban en el sofá?- -Se largó a reír y me preguntó -¿De verdad lo quieres saber?- mirándome fijamente - ¿Bueno, solo si me lo quieres contar? –Le susurre entrecerrando los ojos con voz de niña pequeña acariciando su pierna acercándome peligrosamente a la bragueta de su pantalón. Suspiró y exclamó -¡Mujeres, al fin y al cabo! Entre las muchas cosas que me dijo al oído en las cuales no tienes nada que ver. Si me dijo una que es la que supongo te interesa saber – hizo una pausa observando mi reacción para luego continuar hablando. -Dijo que aunque me quería como a nadie en este mundo, jamás me perdonará que le haya ganado a la mujer que es y será el amor de su vida-. No pude evitar sonrojarme y no hice más comentarios.