1. Un chico lindo, demasiado lindo (6)


    Fecha: 18/06/2017, Categorías: Sexo con Maduras Autor: señoreduardo, Fuente: CuentoRelatos

    ... y allí quedó el pobre, sollozando y frotándose las nalgas en un vano intento de disminuir el doloroso ardor que le quemaba el culito.
    
    -¡Parate! –ordenó la matrona. -¡PARATE O TE VUELVO A DAR! –y el chico se puso de pie dificultosamente, temeroso ante semejante amenaza.
    
    La mujer respiraba agitadamente, muy excitada.
    
    -¿Te vas a portar bien, nene? –dijo gozando el poder que ejercía sobre el chico.
    
    -Sí… -fue la respuesta casi inaudible.
    
    -¡Sí, ¿qué? –reclamó Hilda acercándose con la mano derecha en alto.
    
    -¡No, no me pegue! –rogó el chico retrocediendo y cubriéndose la cara con el antebrazo izquierdo.
    
    -¡SÍ ¿QUÉ?! –insistió la matrona.
    
    -Sí, señora Hilda, me… me voy a portar bien… -aseguró el chico y la mujerona sintió que debía llamar con urgencia a don Ernesto. Antes le indicó al nene el lugar de los elementos de limpieza y lo mandó a barrer toda la casa. En cuanto el chico empezó a hacer la tarea ordenada Hilda llamó a su patrón.
    
    -Soy yo, don Ernesto.
    
    -¿Qué pasa? ¿Hay problemas?
    
    -No, ninguno, es que…
    
    -¿Cómo se está portando?
    
    -Bien, está barriendo. Al principio se me retobó un poco, pero le di unos buenos chirlos y lo dejé mansito. Lo que quiero es… es pedirle permiso, don Ernesto, para cogérmelo…
    
    El viejo lanzó una carcajada y luego dijo:
    
    -Pero sí, mujer, claro que te doy permiso, pero oíme.
    
    -Sí, diga, don Ernesto.
    
    -Esta mañana me hablaste de meterle tres dedos.
    
    -Sí…
    
    -No, vos tenés dedos gruesos y no quiero correr el riesgo ...
    ... de que le rompas el culito y debamos pasar varios días sin usarlo. Conformate con meterle dos dedos, el índice y el del medio… ¿Estamos de acuerdo?
    
    -¡Claro, don Ernesto! ¡Hasta los nudillos le voy a meter esos dos dedos!
    
    En cuanto termine la tarea de sirvientita me lo cojo…
    
    -Que lo disfrutes, Hilda… y no olvides usar la vaselina -dijo el viejo para después cortar la comunicación en medio de una risita malévola.
    
    …………..
    
    Entretanto, los padres del chico estaban desesperados ante la repentina desaparición de su hijo. Hicieron la denuncia en la policía, acudieron a los tribunales, organizaron marchas de vecinos para pedir por la aparición del nene y lograron atraer a los noticieros de todos los canales de televisión e ir como invitados a varios programas en vivo, pero pasaban los días sin novedad y el matrimonio iba cayendo en una angustia cada vez más profunda.
    
    ……………
    
    El chico estuvo barriendo toda la casa seguido por Hilda, que lo vigilaba. Cuando terminó fue mandado por la mujerona a pasar blend por todos los muebles, absolutamente todos, e irlos lustrando. Hilda lo miraba hacer y se relamía contemplando ese cuerpo delgadito y grácil, esas piernas de rodillas finas y muslos largos y tan bien torneados, esa cintura estrecha que realzaba la suave y armoniosa curva de las caderas casi femeninas.
    
    -Muy bien, sirvientita, muy bien… -aprobó Hilda, deliberadamente humillante cuando el chico hubo terminado con el trabajo. –Ahora vamos al baño que vas a darte una ...
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