1. Pecando en el Baño


    Fecha: 27/02/2022, Categorías: Confesiones Autor: Anónimo, Fuente: RelatosEróticos

    Tome mi celular y habían un par más de mensajes de mi novio, de nuevo no le respondí, solo le escribe a mi madre para decirle que iría a casa pronto, me quedé unos minutos mirando el techo un tanto arrienda por lo que había pasado horas antes. Era extraño, estaba nerviosa de solo reportarlo, de nuevo mis pezones se erizaron al recordar cómo le dí sexo oral por un momento a mi amigo, la sensación de su vello público en mis labios aún me hace contener el aliento. Me puse de pie, no quería bañarme ahí ya que no tenía un cambio de ropa, esa sería mi excusa para irme lo más pronto posible, estaba extasiada por lo ocurrido pero también me sentía culpable respecto a mi novia, después de todo, nuestro noviazgo solo tenía un problema, el problema era que él no me cogía, él ya no me despertaba ese deseo de ser fuertemente cogida.
    
    Me puse la ropa encima y tomé mi bolso, salí sin hacer ruido, me pareció que todos estaban dormidos, me dirigí al pasillo donde está la puerta del baño y giré de la perilla, tenía seguro, al instante escuché la voz de él, indicando que estaba ocupado, de nuevo un chispazo recorrió mi cuello al imaginar su moreno cuerpo desnudo, su abdomen un tanto marcado por el ejercicio y su tan apetecible pene erecto. El vello en un hombre siempre me había parecido desagradable y poco higiénico, pero en el me encantaba, él me encantaba, me encantaba la perversión de estar con él.
    
    Me dí la vuelta en el acto, cuando escuché el sonido del seguro quitándose y la perilla ...
    ... girando rápidamente, la puerta se abrió y él se asomó, estaba únicamente en boxers, no lo pensé en ese momento, pero que descarado de su parte salir de su habitación en ropa interior a sabiendas que yo estaba durmiendo ahí, seguro quería que algo como lo siguiente pasara. Me dió lo buenos días con una sonrisa arrogante y se acercó para besarme, eché la cabeza para atrás y lo alejé con ambas manos, él me tomó con suavidad de las muñecas, se acercó aún más a mí y de nuevo intentó besarme en los labios, sentí su pene duro apenas tocando con mi vientre, en ese momento me rendí y dejé que me besara, más bien, no empezamos besarintensamente, aquello parecía más bien una danza de lengua, el beso solo se detuvo cuando le dí una fuerte mordida a su labio inferior mientras le veía a los ojos y los dirigí al interior del baño cuya puerta permanecía abierta, él la cerró con seguro.
    
    Se podía sentir el nerviosismo de ambos al mirarnos a los ojos y sonreír, le pregunté si no se daría cuenta alguien de su familia, él me dijo que todos estaban dormidos, así que continuamos con otro largo beso. Baje la mirada y ví su verga asomándose por el elástico del bóxer, la tomé con mi mano derecha y empecé a masturbarlo mientras nos besábamos, él estaba muy agitado, en ese momento pensé en mi novio, más bien, en su pene, me dió curiosidad saber cuál de los dos era más grande, esa fue la primera vez que me pasó por la mente estar con ambos al mismo tiempo.
    
    Me puse de rodillas y me dispuse a darle la ...
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