Burdel de putas - Relatos Eróticos

Burdel de putas

... refugio y seguridad sin la necesidad de estar en las madrugadas lidiando con borrachos ni violadores o criminales por unos cuantos dólares.

Kevin, aunque hasta la entrega de su herencia era un mediocre bueno para nada, supo aprovechar la oportunidad que Joanna representó y le puso empeño a ése burdel y las remodelaciones fueron exitosas. Él tenía varios clientes seguros entre amigos y compañeros de trabajo, así como los policías corruptos que lo protegían. El día que puso en operaciones aquel burdel con dos putas fue un éxito total. El hombre se encargaba de organizar todo, cobrar y cuidar que nadie se pasara de la raya con sus chicas; y las dos mujeres atendieron a los clientes con el asco habitual de una sexoservidora pero de manera amable y exitante. Con el tiempo Carmen trajo a 4 colegas más al negocio de su Jefe y la plantilla creció así como la demanda. Las chicas nuevas se volvieron fieles trabajadoras de Kevin por la protección y comodidades que les brindaba, respetando siempre la jerarquía de Joanna y Carmen. Poco a poco la fama de Kevin en la vida ...

... nocturna de la ciudad creció y llegó a ganar el salario de un mes de su trabajo diurno en 1 noche en su burdel; por otro lado, la fama de Carmen también creció entre los calientes clientes del burdel debido a su apertura a ser torturada estilo BDSM, atender a hombres en grupos y humillarse con prácticas como petplay, ponyplay y practicar Bondage de manera extrema, servicios que Kevin ofrecía por precios muy elevados y aún así eran pagados sin quejas. El nuevo empresarios y proxeneta pagó sus deudas, recuperó lo invertido y a la vuelta de 6 meses el negocio daba para pagar el porcentaje de sus putas, pagar los servicios del burdel, pagar los sobornos necesarios para operar y a Kevin le quedaban varios miles de dólares de ganancias, todo gracias a la obediencia de su mascota, su puta y las 4 nuevas sexoservidoras que trabajaban para él. Solo Carmen, Joanna y Kevin vivían en la casona de día como si fuesen una familia Feliz. Él cumplió su palabra y el pago de sus putas creció y sacó a Joanna del trabajo, dejándola como su mujer, su esclava, su mascota y sirvienta personal