1. La dependienta de la tienda de hípica


    Fecha: 21/12/2021, Categorías: Infidelidad Autor: Anónimo, Fuente: RelatosEróticos

    ... muy despacio”.
    
    Así hice, me escupí la mano, y le metí un dedo mientras le comía el coño. Seguí metiendo y sacando el dedo hasta que me dijo “mete otro”.
    
    Cuando llevaba un rato, me dijo “métemela, hazme gritar como la perra que soy, hazme sufrir por el mal que estoy haciendo, me estoy portando mal, Manu, muy mal, y la culpa es tuya. Métemela ya”.
    
    Se puso a cuatro patas en el suelo, dejando todo su culo a mi vista. Apoyé mi polla en su ano, y empecé a empujarlo suavemente dentro de su culo. Me asomaba para verle la cara, y la veía sufriendo, con cara de dolor, así que la sacaba, y me decía “¿qué haces? Te he dicho que me hagas sufrir. Métela”.
    
    Volví a meterla lentamente, y poco a poco llegué a meterla del todo. Empecé a disfrutar de su apretadito culo, Dios. Nunca había sentido tanto placer follando.
    
    Ella empezó a moverse ella misma, metiendo y sacando mi polla de su culo mientras yo le masturbaba. Gemía como una loca y me dijo “córrete dentro, me encanta que se corran en mi culo, córrete”
    
    Yo no podía aguantar más y me empecé a correr. Era la primera vez que me corría en el culo de una mujer. Fue una experiencia única.
    
    Seguí dándole después de haberme corrido hasta que ella empezó a gritar y a correrse, y ella misma fue la que, según terminó, se sacó por ...
    ... completo mi polla de su culo y se tiró en el suelo.
    
    N: Dios, para no haberme dado por delante no ha estado nada mal.
    
    Yo: Ha sido increíble. No sabes cuantas veces he soñado con algo así.
    
    N: Vamos, que te has pajeado mil veces pensando en mi. Jajaja muchas gracias.
    
    Me empecé a poner rojo y ella siguió.
    
    N: ¿Ahora te vienes a sonrojar? ¿Después de haberme reventado el culo? Anda, empieza a vestirte a ver si va a venir alguien y va a ver que la verja no está y yo aquí en el almacén desnuda.
    
    Ella se fue al baño, y después nos vestimos en silencio y casi a carreras, y una vez en la tienda:
    
    N: Manu, como te decía antes, eres un chico muy atractivo, a mi siempre me llamaste la atención y, bueno, yo estoy muy bien con mi pareja, le quiero, y no sé qué ha pasado ahora pero ni puede salir de aquí ni se va a volver a repetir. Espero que lo entiendas.
    
    Yo: por supuesto, no hay problema, seguiré viniendo a comprar si no te molesta, eres la dependienta más guapa que conozco Jajaja
    
    N: claro que no me molesta, me encantará atenderte, como siempre. Cuídate mucho.
    
    Nos dimos un abrazo y salí de la tienda con una sonrisa de oreja a oreja y sin las cosas que había comprado, menos mal que me di cuenta al llegar al coche y pude volver a recogerlas.
    
    Nunca olvidaré ese domingo. 
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