La felicidad de un cuckold
Fecha: 08/12/2021,
Categorías:
Intercambios
Autor: Lobo-y-Luna, Fuente: CuentoRelatos
... 15 días. Por cierto, esta es mi mujer, Luna.
Ella entre rubor y la excitación se levantó y le dio dos besos, posando la mano en su pecho, cosa que no me pasó desapercibida.
-Yo soy Kiyo, encantado - le dijo, mirándole las tetas con descaro, cosa de la cual ella se percató y me miró, pero yo riéndome no le hice caso -Y donde os estáis alojando?
-En un apartamentito muy mono muy cerca de aquí - contestó ella sin dejarme hablar.
Otra mirada fugaz a su polla. El alcohol y el trabajo con la polla de goma estaban haciendo efecto.
Estuvimos unos minutos hablando de pie hasta que le dije:
-Oye y has venido sin sombrilla! Estas muy moreno colega, pero aun así te vas a quemar! Vente con nosotros a la sombrilla y así te echas una copa o una cerveza, lo que prefieras!
-Pues mira, solo había traído una cocacola, pero me apetece mucho- dijo y se fue a por la toalla.
Mi novia me miró entre sorpresa y negación, pero le dije:
-No pasa nada cariño, me pone como te está mirando.
-Ya pero ¿con nosotros?
-No pasa nada vida.
Llegó, se sentó y nos pusimos a hablar.
Ella es una oradora nata, así que estuvimos hablando como una hora, yo mientras no dejaba que el alcohol faltara y la iba notando pintona.
Hablamos de los trabajos, de las vacaciones y llegamos al tema nudismo.
-Pues no quería hacer nudismo, le daba vergüenza- dije yo.
-Vergüenza por qué? si tiene un cuerpo de escándalo- dijo él.
Ella se rio y se puso colorada. Ahí vi mi ...
... oportunidad.
-Te has fijado en el cuerpazo que tiene? yo siempre le dicho que es una diosa.
-Y tanto que lo es. Que no te de vergüenza mujer, si es lo más natural.-dijo mi amigo.
-Es que era la primera vez, pero ya me solté. -dijo riéndose.
-Cariño, date la vuelta y enséñale el culazo que tienes.- le dije
Me miró sorprendida.
-No pasa nada cariño, sabes que me gusta mucho que te admiren.
Y para mi sorpresa, sentada como estaba se recostó de lado y nos mostró su culo.
En ese momento supe que estaba todo encaminado y se me puso dura.
Ella sonriendo me miró la polla.
-Uff cariño, se me ha puesto dura de que Kiyo te vea el culo. jajaja y ni aun así tiene nada que ver con su polla, porque te habrás fijado que pollón tiene.
Ella empezó a reír, recostada de lado enseñándonos el culo y empezó a mirar el pedazo de polla, que empezó a aumentar un poco de tamaño.
-Sí que tiene una polla grande - dijo riendo.
-Gracias y tú tienes un culazo y unas tetas preciosas.-dijo en respuesta y ella se rio y se tapó la cara.
No me lo podía creer, parecía que había complicidad y eso me la ponía más dura todavía. Decidí pasar a la acción.
Me senté a su lado y le dije:
-Cariño, me está poniendo mucho que te miren. Mira, tócamela.
Ella, ni corta ni perezosa, me agarró la polla y me la meneó para ver lo dura que estaba, y me la soltó.
Yo le cogí la mano y me la lleve a la polla que casi de forma automática empezó a pajearme despacio.
-Mira como nos mira mi amigo, ...