La profesora de autoescuela (II)
Fecha: 20/10/2021,
Categorías:
Dominación / BDSM
Autor: bimont, Fuente: CuentoRelatos
... mientras se había sentado en la cafetería.
-¿Dónde estás? -su voz se oía nerviosa.
-¿Estás decepcionada por no estar para recibirte?
-Sí... No, pero...
-Tranquila, estoy aquí, no te muevas, te estoy viendo -Levantó la vista para intentar localizarme.
-Hace ya rato que he llegado, ¿dónde estás?
-Por tu voz creo que estas emocionada y deseosa por verme.
-Sí... sí... tú también ¿no? tengo muchas ganas de verte.
Sin más preámbulos y con voz enérgica: -Ponte de pie y date una vuelta sobre ti misma -Quería apreciar mejor como iba vestida, vestido túnica estampado camisero, zapatos de talón, medias y una chaqueta sobre los hombros. Me quedé unos instantes observándola.
-Escúchame bien, no busco ni ser tierna y ni gentil.
-Pero... que quieres decir -Su voz se quebró, aguda y se movía nerviosa.
-Ahora entra en los lavabos que tienes al lado derecho y despréndete de toda tu ropa interior. Quédate con las medias. Te espero.
-Pero... que quieres...
-No pienso repetírtelo, es simple, te lo ordeno ¿quieres o no quieres?
-Yo... sí... pero... -estaba inquieta. Unos instantes más y lentamente se encaminó hacia los lavabos. Dulce rendición pensé para mis adentros. Salió con la mirada baja. Me incliné y la besé suavemente en los labios, sonriéndole. Su rostro ligeramente sonrojado, su mirada a veces penetrante, ahora era dócil. Me encantaba haberle provocado aquella reacción.
-¿Cómo estás, mi amor? -Susurré, apoyando mi frente contra la de ella. ...
... Cerró los ojos y suspiró mientras le tocaba un lado de su cara.
-Me siento bien, cariño. Pero...
-Mírame, ¿por qué tan tímida, Marta? Pensé que ibas alegrarte por verme de nuevo.
-Sí... pero es solo que algunas cosas que... -Levantó la cabeza y me miró a través de las gafas y de la cortina de su cabello.
-Escucha. Creo que lo hablamos y que las cosas que hacemos ó haremos son producto de necesidades mutuas.
-Sí, por supuesto, sé que tienes razón. Lo siento -De repente, sus manos estaban en mi cintura, tirando de mí hacia ella, abrazándome y al poco besándome.
-Muy bien entonces, estás de acuerdo, todo arreglado.
-Sí...
-Te ves hermosa.
-Gracias... Sí...
En el parking y ya dentro del coche. Le besé la mejilla suavemente. -Buena chica -le susurré al oído, la lengua jugando en su oreja, los dedos acariciando su cuello-Muéstrame que no llevas nada debajo del vestido.
-Por favor... ahora y aquí... -Su voz estaba llena de preocupación.
Le entregue una botella de agua que llevaba en el coche. -Bebe un poco.
-Gracias.
-Quieres que mis manos, mi lengua, mi boca cuiden de tus pechos, tu sexo o ese bonito culo que tienes.
-¿Quieres cuidarme? -El agua había ayudado.
-Sí, quiero cuidarte. Yo sé lo que necesitas.
-Sí, tienes razón, es que a veces me asustas...
-Pues deja ya de asustarte -Levantó lentamente la falda del vestido y me mostró su coño desnudo. Separó las piernas, mientras le pasaba una mano por la parte superior del vestido y ...