1. Me trataba de usted


    Fecha: 29/09/2021, Categorías: Sexo con Maduras Autor: Quique., Fuente: CuentoRelatos

    ... entre sus piernas, y comencé a comerle el coño. Ya no me llamaba guarro, no me lo llamaba porque a ella también le gustaba rebasar el límite de lo socialmente correcto.
    
    A estas alturas del partido quien me lee sabe que me gusta más un culo de mujer de lo que le gusta a un niño un caramelo. Así que después de tragar todo lo que salía de su coño, o sea, cuando ya lo dejé seco, agarré dos cojines y se los puse debajo de las caderas. Su periné y su ojete quedaron a mi disposición. La morena abrió bien las piernas y se echó las manos a las tetas. Yo me lo tomé con calma, primero lamí el periné y el ojete, despacito, después le follé el ojete con la punta de la lengua, luego se lo follé con la punta el dedo medio, y al final mi dedo entero entraba y salía de él mientras besaba y lamía el interior de sus sedosos muslos, Ella, con los ojos cerrados, no paraba se sobar sus bellas tetas. Sus labios vaginales estaban hinchados y abiertos, su clítoris erecto fuera del capuchón, y de su vagina comenzó a salir un jugo blanco cómo la leche que bajaba hasta el ojete y engrasaba mi dedo. A mi me latía la polla. Vi cómo la morena agarraba la almohada con una mano. Se iba a correr. Al tiempo que mordía la almohada y temblaba, su coño se empezó a abrir y a cerrar y a soltar jugos. Le quité el dedo del culo y vi cómo el ojete se abría y se cerraba acompasado con el coño. La morena levantaba la pelvis hasta el infinito en busca de una polla, de una caricia, de algo, pero no la toqué, dejé que se corriera. Cuando acabó metí su coño en la boca y después lo lamí de abajo a arriba. Las palmas de sus manos comenzaron a pegarle al colchón. Rompió a reír cómo si le acabara de contar el mejor chiste del mundo, apretó mi cabeza con sus muslos se retorció, se encogió, lloró, y acabó riendo de nuevo... ¡Cómo se corrió! Echó por fuera cómo un embalse cuando rebosa.
    
    Fueron tres horas de una tarde muy corta, pero muy intensa.
    
    Quique.
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