1. Nadia, Natalia y yo segunda parte


    Fecha: 10/02/2018, Categorías: Dominación / BDSM Autor: Jessica.velatti, Fuente: SexoSinTabues

    ... ayuda, olvide la palabra violación y ahora estaba el placer, tercer sorpresa de la noche. Mi novio nunca me había hecho sentir algo tan rico y me di cuenta, justo antes de comenzar a sentir orgasmos y perderme en el placer y dejar de pensar, justo antes recordé lo que este pizzero me había dicho: “a ti te va a encantar, hoy te vas a dar cuenta de lo puta que eres” Me tomo del cabello y me jalaba hacia atrás mientras me follaba, cuando él estuvo a punto de terminar se levantó, me puso de rodillas y me dejó una enorme cantidad de leche en la cara, caliente y blanca—Límpiame la verga—Me dijo. Comencé a chupársela de nuevo, recuerdo que esta vez intentaba meterlo lo más que podía—muy bien puta—él estaba de pie mirando mi cara llena de semen mientras le mamaba la verga con las manos atadas a mi espalda—Lo gozaste tanto porque eres una puta, tu solo estas aquí para darle placer a los hombres y por eso lo disfrutas. Eres un objeto para llenar de leche—me decía mientras se la chupaba, yo ponía atención mientras trataba de hacer mi mejor mamada. Comenzó a explicarme que él quería una esclava sexual y que eso solo era una prueba de lo que iba a pasar, me dijo que las mueres dejaban de pensar y preocuparse pues solo había na meta que cumplir, eso les facilitaba la vida. Me explico todo lo que me haría y lo mucho que yo lo gozaría. Mientras más hablaba más dura se le ponía hasta que se corrió de nuevo, esta vez en mi boca, me ordeno tragarlo y lo hice. Se metió la verga y saco una ...
    ... hojita con su nombre y su teléfono, Javier, acercó su celular a mí y me dijo—di algo convincente para que parezca que fue tu idea coger. -Javier, mi casa está sola, vienes a cogerme? Dije con la vos más sexosa que pude hacer -Así demuestro que no te viole, págame la pizza -En mi bolsa—Fue a mi bolsa, encontró mi cartera, saco los dos mil pesos y se los quedo -tienes mi celular en esa hoja. Piensa lo que te dije y cuando decidas ser mi puta, porque lo harás, llámame. Te diré que hacer—Se acercó para agarrarme una vez más las tetas y darme un último apretón de nalgas y nalgadas y se fue. Me dejó de rodillas, llena de leche y con las manos atadas. Dejo la puerta abierta. Cuando oí la moto irse me puse de pie y con el hombro cerré la puerta. Tarde unos 20 minutos en desatarme y me fui a bañar. Cuando me di cuenta días después que mi novio no me daba placer ni el consolador, le marque. Él riendo me dijo que me pusiera la mejor lencería que tuviera, me pintara y arreglara y me dio su dirección. Me sorprendí mucho al esforzarme por verme hermosa y rica para él, escogí una lencería negra de encaje, tome el auto y me fui. Su barrio, porque eso era, un barrio, era de los más pobres en mi ciudad, su casa era chica, mal pintada y olía a caca de perro, pero aun así entre a su casa. Pasa y desnúdate—me dijo yo entre y comencé a desabrocharme el cinturón cuando me di cuenta que no cerró la puerta—así se va a quedar. Me dijo, tengo calor—Dijo y se fue a sentar en el sillón Su casa era una sala ...