En el baño con una Cosplayer Otaku - Relatos Eróticos

En el baño con una Cosplayer Otaku

... blanca resaltaba sobre el vestido negro y sus aureolas de color café clarito parecían dos pastelitos que no dudé en empezar a besar. Mi lengua en círculos al rededor de su pezón para después meterlos en mi boca. 

Traté de quitarle la peluca pero ella hizo un movimiento con la cabeza en señal de no.
- No mates la fantasía, ¿Cuántas veces te la ha chupado 2B?
Carla se inclinó frente a mi y mientras yo me quitaba el cinto ella desabrochaba mi pantalón con un rostro de lujuria. Al mismo tiempo los gemidos de nuestros amigos a través de los cuartos se intensificaban. Todo el habiente era tan sexual que nadie podría evitar estar prendido.

La silueta de mi pene se formaba a través del bóxer, solo bastó que Carla bajara un poco del elástico para que mi pene se liberara y se bamboleara frente a su cara, quien miró con mucha ilusión lo que tenía enfrente, parecía una pequeña en su cumpleaños.
En cuanto al tamaño de mi pene puedo decir que estoy bine dotado pues mi altura propició un buen tamaño y sobre todo un buen grosor.
- Míralo, todo rojito de estar atrapado todo el rato. No te vas a correr, hee. Dijo Carla mientras lo tocaba con delicadeza.
Comenzó a masturbarme lenta pero firmemente, mientras me veía sonriendo, disfrutando cada momento, sacando cada gota de la miel que emanaba mi cabeza roja, listo para lubricar. Acercaba poco su boquita y apenas si sentía el cálido de su respirar. Necesitaba sentir la humedad de su boca. Puso su lengua el mi glande, estaba que ...

... quería estallar.
- ¿Qué esperas para cogerte mi carita? Dijo mientras puso cara de refunfuño. Dijiste que me ibas a part....huummm
Ni la deje terminar de hablar pues empuje con mis manos su cabeza para que se comiera mi pene, cosa que no pudo sin hacer arcadas, apenas le cabía la mitad de mi pene. Carla intentaba separarse poniendo sus manos en mi pierna para que le diera espacio a respirar, cosa que le permitía de tanto en tanto.
Deje de empujarla pues ella solita intentaba comerse mi pene, mire abajo y ella ya había hecho a un lado su ropa interior para jugando con su vagina. 
Tomé a Carla del rostro e hice que se pusiera de pie, la bese y lleve la barra del lava manos, y empecé a bajar por su cuello, sus pechos. Ella levantó la falda de su vestido, bajé su ropa interior y empecé a besar besar sus labios, mientras ella subía su pierna derecha a mi hombro.
Mi lengua jugaba con su clítoris, identificando que era lo que le gustaba, era muy sensible, a lo que solo hacia movimientos en círculos. Mis movimientos eran buenos pues sus gemidos ya habían perdido toda discreción de ser escuchados por los de afuera.
Introduje mis dedos índice y medio, fue fácil pues estaba muy mojada. Comencé a frotar la parte superior de su interior, esa esa zona que tanto pareció gustarle mientras aceleraba el ritmo, sus espasmos empezaron a ser violentos hasta que dijo entre jadeos:
- ¡Metemela ya, metemela!
- ¿Te vas a venir? Le pregunte.
- Sssiiii, si, me vengo.... metemela.
- Me pongo el ...