En el baño con una Cosplayer Otaku - Relatos Eróticos

En el baño con una Cosplayer Otaku

Hola, mi nombre es Eduardo y soy de México. El siguiente relato es de cómo cumplí mi fantasías de tirarme a una cosplayer.

Todo comenzó cuando un par de amigos, Julio y Marianita, me invitaron a una convención local de anime y videojuegos. Nada fuera de lo normal al inicio pues aunque no me gusta el anime, el tema de los videojuegos si es uno que me guste.
Pero lo que realmente llamaba toda mi atención y seguramente la de todos los visitantes era ver a jóvenes vestidos de personajes de fantasía; espadas, alas, armaduras, pero sobre todo chicas con atuendos tan sexys que parecía otro tipo de convención. Lamentablemente yo ya tenía en aquel momento 23 y muchas de las presentes aun eran muy jóvenes para mí (menores de 18).

Hasta que siguiendo a mis amigos saludando a sus conocidos, llegamos con un grupo en el que resaltaba una chica llamada Carla, se veía más de mi edad o esa era la impresión que daba pues era alta, sumando que tenía tacones. Yo si bien mido 1.92 ella andaría en el 1.80, bastante más alta que las mujeres promedio de mi país.

Y bueno paso a describirla; ella realmente tenía apenas 19 años, alta como ya dije, de tez blanca, piernas muy largas y bien torneadas y unos pechos que si bien no eran lo más grande, era suficiente para dedicarles una paja con tan solo verlas. ¿Y ella de qué iba vestida? Pues de 2B, un personaje de un videojuego llamado Nier Automata. Es un personaje que usa un vestido negro de encaje, la falda abierta por un costado revelando ...

... parte de su ropa interior blanca. Medias negras y botas de tacón, lo que realzaba un trasero respingón elevando naturalmente su vestido, unos guantes blancos y una peluca de cabello corto color blanco.

La platica en grupo fue entretenida, entre chistes y conversaciones interesantes, pero yo me enfoque en hablar con Carla, con la excusa de que éramos los únicos altos en la convención hacíamos chistes al respecto y la acompañé todo el día hasta el anochecer. En ratos salíamos al estacionamiento ya que uno de mis amigos, Julio, tenía cervezas en una hielera y no nos dejaban acceder con alcohol, a lo que nos la tomábamos como agua que viene. Hasta que llegó el momento en el que decir qué hacer al salir de la convención pues ya estaba siendo hora del cierre.

Decidimos pasar por cervezas a un mini súper OXXO y de ahí ir a la casa de Julio, pero como ya éramos 7 contando a Julio, Marianita, Carla, y yo nos fuimos bastante apretados. Total que me senté atrás esperando que Carla se acomodara a mi lado pero sorpresa que fue Mariela quien dijo: Con permiso que ahí voy, y se sentó en mí, acomodándose de lado para poner su brazo al rededor de mi cuello. Volviendo el momento incomodo con Carla. Ya en el viaje, mientras tomábamos las cervezas que aun quedaban en la hielera no podía dejar de notar que Marianita se movía mucho, a ella la describiré después pero basta con saber que apenas mide 1.45 y lo pequeña que es lo compensa en pechos, trasero y carita de niña inocente que tiene.

En ...