El 4 de julio con mamá - Relatos Eróticos

El 4 de julio con mamá

... empezaba a cogérmela. Mamá me devolvía el movimiento de su coño, siguiendo el ritmo de mis embestidas. Me coloqué más erguido y agarré las caderas de mamá. Esto me permitió agarrarla con fuerza y penetrarla a fondo, cogiéndomela con fuerza y rapidez.

Mamá gemía y decía "¡Sí! ¡Sí! Sí" una y otra vez. "¡Oooooh Bobby! Mamá se va a correr".

Sentí que su coño se apretaba aún más mientras gritaba "¡Sí, cógeme! Cógeme fuerte".

Su espalda se arqueó y su cabeza rodó hacia atrás mientras llegaba al clímax. Mi verga estaba siendo succionada por su coño. Apretando con fuerza y parecía estar tirando de mí más profundamente. No pude contenerme más y sentí que mi propio orgasmo se acercaba rápidamente.

"¡Me voy a venir, mamá!"

"¡Sí! ¡Bobby cógeme y lléname! Cógeme. ¡Oh Dios! Cógeme!!"

Mi verga explotó disparando lo que se sintió como torrentes de semen en el coño de mamá. Ella me agarró por el culo y me atrajo hacia ella. Mi verga bombeaba y bombeaba semen en el coño de mamá. Follé más fuerte y más profundo hasta que no pude más y me derrumbé encima de ella.

Nos quedamos tumbados sudando y respirando con dificultad.

"Te quiero mamá"

"Yo también te quiero, hijo".

Me hice a un lado y dejé que mi verga saliera de mamá. Nos quedamos tumbados uno al lado del otro, con los ojos cerrados, recuperando la compostura.

Después de unos minutos nos levantamos y volvimos a la piscina para refrescarnos.

Pasamos el resto de la tarde besándonos y jugando el uno con el otro.

Más tarde entramos y comimos algo, luego subimos a la habitación de mamá y pasamos el resto de la noche chupando, comiendo y cogiendo el uno al otro.