1. El pecado.


    Fecha: 06/05/2021, Categorías: Confesiones Tus Relatos Autor: PPTon, Fuente: Relatos-Eroticos-Club-X

    ... chocolate, riquísimo. A los pocos días, el padre nos informó que, como servidores de Dios que éramos, debíamos estar siempre en su gracia con la confesión y comunión en cada misa que nos tocaba. Mi desánimo fue grande, pero como no dejaba de pecar, tuve que seguir ocultando mis pecados sexuales. Un día, “El Grillo” me dijo que él ya se lo había confesado al padre y concluí que también le había dicho con quién pecaba, cuando el sacerdote me pidió que le confesara todo, que no iba pasar nada y sí, efectivamente no pasó más que una explicación de lo que son los pecados de la carne y de que cuando se hace en el nombre de Dios y con amor a él, el pecado es perdonado, sin necesidad de confesárselo a nadie más que a él como sacerdote. No lo entendí cabalmente, pero quedé muy conforme.
    Nunca me pasó por la cabeza lo que luego iba a pasar. Primero nos juntó al “Grillo” y a mí para que los 2 ayudáramos en las misas de los sábados y domingos. Luego dispuso que durmiéramos en un cuarto, cada uno en una cama matrimonial y que cerrábamos con llave por dentro, según las instrucciones de la ama de llaves. Obviamente los dos nos acomodábamos en una sola para cogernos y nos la pasábamos muy bien, muy calientitos y contentos, estando seguros que nos descubrirían. Luego de una semana, el padre nos movió, al “Grillo” el día martes y a mí el día jueves y los dos el domingo solamente. Cuando le tocó al “Grillo” me la pasó aún en caliente. Resulta que luego de cenar se fue a la cama y se quedó ...
    ... dormido. Ya entrada la noche sintió que alguien se acostó detrás de él, era el padre que, totalmente desnudo, lo rodeó con el brazo hasta que su mano se posó sobre su pequeño pene debajo del calzón de manta, haciéndole caricias y diciéndole suavemente que no tuviera miedo. Casi de inmediato, sintió cómo crecía la verga del padre y la ponía exactamente en el hoyo de mi amigo, a la vez que desataba el cordón de su calzón para bajárselos hasta la rodilla. Dice “El Grillo” que sintió aquello muy duro y muy caliente y que luego de unos piquetitos, lo sintió muy resbaloso. Que el hombre siguió picando hasta que al principio sintió dolor cuando le entró la cabeza de aquella verga que estaba super caliente, pero que solamente pujó un poco porque le estaba gustando mucho, cómo su piel se estaba estirando para dar paso a tan grande leño. Que cuando sintió que entraba hasta el fondo, quiso gritar pero que sólo le salió un gemido y le sacó un poco, pero que lo negó cuando el padre le preguntó si le dolía. Me dijo que lo único que quería era que siguiera el mete y saca sin parar y así lo estaba haciendo el hombre. Que de pronto pegó un grito, empujó fuerte hasta moverle algo en lo más adentro de su culo y sintió que su vientre se puso muy caliente y cómo ese líquido salía y escurría por entre sus nalgas y piernas. Que le dio varios empujones que igual le movieron algo allá muy adentro. Me confesó también, que ya tenía tiempo queriendo que le hicieran lo que este hombre le estaba haciendo. ...
«1234...7»