Todo va mejor
Fecha: 07/01/2021,
Categorías:
Hetero
Tus Relatos
Autor: Caramelo, Fuente: Relatos-Eroticos-Club-X
... fíjate.
Se paró frente a mí. Se puso de espalda y se levantó la pollerita. Estaba con la bombachita.
-Esperá. Me fijo bien.
Se la bajé hasta los muslos y vi sus hermosísimos glúteos, perfectos, sin ninguna “falla”. Le tomé cada cachete con las manos, y apreté “tanteando” la diferencia.
-Tenés razón. Tenés el cachete izquierdo un poquito más grande que el derecho.
-¡Jajaja!
Todo esto hablando muy bajito.
-Pero los dos son hermosos, como para besarlos. – Me agaché hacia ellos y le di un beso en cada uno.
Cuando sintió mis besos paró más el culito. Se los volví a besar y a fin de no tentar al diablo le levanté la bombacha. Tuky se sentó.
-¿Viste? Es como te dije. – Se inclinó hacia mí. – Me gustaron mucho tus besos. – Y me besó en la boca.
-Tenés razón. – Me tire el lance. Era lo apropiado. - ¿Tu mamá anda por aquí?
-No, está en la pieza del fondo, planchando. ¿Por qué?
-Es que…, ahora que lo decís, me estoy dando cuenta que tengo un testículo más grande que el otro.
-¡Oh! ¡Sí! Claro, tiene que ser. ¡Déjame ver!
-¿Ahora? ¿Y si viene tu mamá?
-No, no. La escucho. Dale, mostrame, quiero verlos. ¡Yo te mostré la cola!
-Bueno, primero mostrame las tetas.
-No, ahora no. Tengo que sacarme el corpiño y tardo mucho para volver a ponerlo.
-Ah, así no vale.
-Te prometo para el próximo miércoles. ¿Puede ser?
-Está bien.
-Mostrame tus testículos.
-Pero…
-Dale. Yo te mostré lo que me pediste. No seas egoísta.
-Pero tengo que pararme para poder sacarlos del ...
... pantalón. - En realidad yo estaba totalmente al palo. Me dolía de cómo lo tenía duro.
-Parate - Hice lo que me pidió y ella me desabrochó los botones del pantalón. Todavía no me habían llegado los jean con cierres.
-¡Pero tenés el calzoncillo!
-¿Viste que no es fácil?
-Yo te lo saco.
Ahí temblé. Mi pija estaba tan dura que me parecía que iba a ser difícil. Así que me metí la mano, levanté una de las piernas del calzoncillo y me saqué todo, pija y huevos, teniendo cuidado de cubrir la pija, tomándola con la mano, como si hubiera de hacer una paja.
-¡Es cierto! Tenés el testículo izquierdo más grande, como yo la teta.
-¡Somos almas gemelas!
-¡Jajaja!
-Bueno, ya viste. – Me la iba guardar.
-¡Pará, pará, pará! - Puso una de sus manos sobre lo que quedaba libre de la pija y la otra sobre la mía, para sacarla y que el tronco quedara más libre.
-Sacá esta mano, dale. - Y me la tomó con las dos. Bien en primer plano queda el glande.
-¿No tenés prepucio?
-No, me operaron porque tenía fimosis.
-¿Y eso qué es?
-Es la dificultad de retraer el prepucio y eso trae dolor.
-¿Por qué? ¿Cuándo?
-Bueno…, cuando querés lavarte el glande o…, bueno… cuando querés metérsela a una chica. Como yo tenía ese problema me operaron.
-¿Ya habías andado con chicas?
-Algunas veces.
-¿Me contás?
-En otro momento. Ahora guárdamelo.
-Es precioso. Me gusta.
-¿Cómo sabés lo del prepucio?
-Por mis primitos. Cuando eran chiquitos yo ayudaba mi tía a bañarlos y entonces ella me decía “correle el ...