1. Satisfaciendo a mi gordita


    Fecha: 28/10/2020, Categorías: Hetero Tus Relatos Autor: Pervertido, Fuente: Relatos-Eroticos-Club-X

    ... hasta que me vine dentro, pero con el condón puesto. Entre al baño a enjuagarse y después lo hizo ella, cuando salió yo estaba acostado boca arriba y mi erección estaba casi plena de nuevo, ella me miró y sonriendo me comentó que le gustaba verme así, se monto en mi tallando su vagina peluda en 
    verga, empecé a sentir como sus jugos salían y me.mojaba con ellos, ella seguía montada masturbándose, pasando su rajita a lo largo de mi miembro hasta que se empezó a introducir en ella
    
    -¡Espera, no tengo puesto el condón!
    
    -No me importa, te quiero sentir así, ¿Tu no? ¿No ten gusta? Dime qué está sintiendo papi
    
    - ¡Delicioso cosita, delicioso.
    Me monto por varios minutos así, sentía como su interior estaba caliente y se vino, una dos veces seguidas, gimiendo y mordiendo mis labios y mi cuello. Para este momento ya me pude controlar mas y lo estábamos disfrutando mucho.
    
    Cambiamos de posición y la coloque en cuatro, así la estaba cogiendo y azotandole sus blancas y grandes nalgas, gemía y me decía la tomara del pelo, que le dijera cosas sucias, lo hice, le decía que estaba bien sabrosa y ya tenía muchas ganas de cogerla, que en esos años que dejamos de vernos estaba mucho mejor, pero ella quería más.
    
    Estuvimos largo rato en esa posición, yo le veía su culo y recordé que antes nunca me dejó cogerla por ahí, le coloque mi pulgar ensalivado en el y se lo masajeé hasta irselo hundiendo poco a poco, le metí el dedo medio sin que protestara después me coloque tras ella y ...
    ... empecé a mete.mi verga despacio, ella lo apretó haciendo difícil el intento,más yo estaba decidido, ese culo me lo tenía que coger, así al pelo. Me decía que no, que le estaba doliendo
    
    -Ahora te aguantas mamacita, querías que te cogiera y te voy a cojer por completo, de nada valieron sus protestas y no le quedo más que aguantar mi embestida, me decía que le seguía doliendo y yo solo le respondía que se relajara, nada y lo disfrutará, le seguía azotando sus nalgas y de a poco fue cediendo, gemía ya de placer, pero en un movimiento brusco me salí de ella y me encontré con la sorpresa de tener mi verga completamente sucia, la verdad eso no me hizo gracia y me retire al baño a lavarme, ella entro al wc para después alcanzarme en la ducha
    
    -Ves lo que provocas, me dijo sonrojada
    
    -No importa, al fin ese culito es mío, y tú también cosita. 
    
    Me besó los labios y bajo el agua caliente de la ducha me masturbo, cuando sentí que pronto terminaría me la llevé de nuevo a la cama y de nueva cuenta el abrí sus sus piernas y empezamos a coger moviéndonos al mismo ritmo, las gotas de agua que estaban por nuestros cuerpos se empezaron a confundir con nuestro sudor, cuando me vine lo hice si re su vientre, bañandola toda
    
    -¡No manches papi, mira cuánto te veniste!
    
    - Te gustó? 
    
    -Mucho, nos da tiempo para otro. Me dijo sonriendo y besándome, 
    
    Esas fueron las palabras mágicas para que empezará a tener otra erección, al darse cuenta sonrió admirada.
    
    -No lo puedo creer! ¿Pues que ...